23 Junio de 2020 10:08
El tenista serbio Novak Djokovic, número 1 del mundo, fue diagnosticado con coronavirus, luego de someterse a un test en la ciudad de Belgrado, donde jugó un torneo de exhibición donde varios de los tenistas también terminaron contagiados. La esposa de Djokovic, Jelena Ristic, también dio positivo. Días atrás, el tenista había minimizado el peligro de contagio. El llamativo “reto” del ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires.
En un comunicado, el propio Djokovic contó que había sido diagnosticado, aunque aclaró que sus hijos dieron negativo. “Todo lo que hemos hecho en el último mes lo hemos hecho con un corazón puro e intenciones sinceras. Nuestro torneo fue de carácter humanitario, con la idea de ayudar a los tenistas de la región, proporcionarles condiciones para jugar, obtener ingresos y, de ese modo, superar este período difícil con mayor facilidad”, sostuvo.
El tenista serbio había quedado envuelto en el escándalo "anticuarentena" días atrás, no sólo por la organización del torneo Adria Tour, sino porque además se negó a someterse a un hisopado pese a que había habido varios casos positivos en el certamen. Sin ir más lejos, la final del torneo, ante el ruso Andrei Rubley, fue suspendida justamente por el avance del COVID-19.
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Según detalló, el torneo fue organizado en un momento en que el virus se había “debilitado” y “creyendo que se habían cumplido las condiciones para su mantenimiento”: “Lamento muchísimo cada caso individual de infección, sigo las declaraciones de los médicos y espero que el número de personas infectadas no aumente”, señaló, y agregó: “Espero que la situación de nadie sea complicada y que todos estén bien”. Y concluye: “Permaneceré en aislamiento durante los próximos 14 días y repetiré la prueba en cinco días”.
Lo cierto es que Djokovic fue muy cuestionado en los últimos días debido a la organización del torneo, que no respetó las restricciones sanitarias por la pandemia de coronavirus. De hecho, el tenista minimizó el peligro de contagios y hasta publicaba en sus redes sociales fotografías de reuniones multitudinarias sin ningún tipo de cuidado, ni barbijos, ni distancia social. Hubo apretones de mano, abrazos y hasta una fiesta privada nocturna.
