En 1962, el célebre escritor de ciencia ficción Philip K. Dick publicó una de sus novelas más famosas. “El hombre en el castillo” cuenta la historia de unos Estados Unidos derrotados en la Segunda Guerra Mundial.
Cincuenta y tres años después, la división audiovisual del gigante Amazon convirtió esa distopía en una serie, cuyos capítulos se estrenaron, completos, el viernes pasado.
El impactante afiche de la serie.
Para promocionar el lanzamiento, la productora lanzó una jugada arriesgada: llenar un vagón del subte que va de la estación Grand Central a Times Square con símbolos del Tercer Reich, como el Águila Imperial.
Aunque no había esvásticas, las protestas llegaron rápido, incluso de boca del alcalde Bill de Blasio. “Después de las presiones, la Autoridad del Transporte de la ciudad (MTA en sus siglas en inglés) retiró toda la campaña el miércoles”, precisa el diario El País.
La Liga Antidifamación, que controla ataques antisemitas, calificó a los anuncios de "insensibles". Y el gobernador neoyorquino, Andrew Cuomo, tuvo que intervenir para retirar la publicidad.
"Los anuncios no violaban nuestro contenido neutral", intentó explicar un representante del subte. "No podemos aceptar anuncios según nos sentimos". Pero en octubre, recordó el diario madrileño, se bajó el anuncio de una marca de ropa interior femenina para la menstruación.