Siguen las amenazas comerciales y de las otras. Luego de anunciar le revisión del tratado de libre comercio con México y Canadá, entre otros, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió que no descarta una acción militar contra Irán, en la primera escalada de tensiones con la república islámica desde su llegada a la Casa Blanca.
Todos bajo amenaza. Ahora, Irán.
"Nada está fuera de la mesa", aseguró Trump al ser consultado por periodistas, un día después de que su asesor de Seguridad Nacional, Michael Flynn, acusara a Irán de tener un "comportamiento desestabilizador en Medio Oriente".
Hace pocos días Irán probó un nuevo misil de alcance medio.
El domingo pasado sonaron las alarmas cuando Irán probó un misil de medio alcance que explotó tras recorrer unos mil kilómetros, y el lunes, el movimiento rebelde chiita de los hutíes, apoyado por Irán, bombardeó con éxito una buque de guerra saudita en el Mar Rojo.
Para la Casa Blanca, pero no para los iraníes, el misil de mediano alcance lanzado el domingo es "inherentemente capaz" de ser utilizado para lanzar un arma nuclear y motiva la amenaza.
"Agradecidos"
Turmp consideró que Irán debería estar "agradecido" por el "espantoso" acuerdo nuclear sellado en 2015 con el G5+1 y ONU y recordó que Washington ya le había advertido sobre su política nuclear.
Irán firmó un acuerdo con EEUU y la ONU y Trump se lo recuerda.
"Irán estaba listo para colapsar hasta que Estados Unidos le dio un salvavidas a través de ese acuerdo: 150.000 millones de dólares", subrayó el presidente, en referencia al levantamiento de las sanciones económicas que incluyó el acuerdo, entre ellas la liberación de los depósitos iraníes en bancos estadounidenses.