Su corazón de madre no lo soportó. Un día después del golpe que significó para ella la muerte de su hija, Carrie Fisher, la actriz Debbie Reynolds falleció a los 84 años.
Debbie Reynolds y su hija, Carrie Fisher, durante una entrega de premios.
La protagonista de “Cantando bajo la lluvia” había sido internada de urgencia en un centro médico de Los Ángeles a raíz de un accidente cerebrovascular, en momentos en que se encontraba organizando el funeral de su heredera.
Vale recordar que ayer, pocas horas después que se diera a conocer la muerte de su hija, Debbie había publicado un emotivo texto en su cuenta de Facebook.
“Gracias a todos los que han alabado las cualidades y talentos de mi querida e increíble hija. Estoy muy agradecida por vuestra preocupación y oraciones, que ahora la guían a su nueva etapa. Con amor, la Madre de Carrie”, escribió.
El recuerdo