26 Octubre de 2016 15:02
Es un hecho insólito en los últimos 24 años: Estados Unidos se abstuvo en la votación de la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) para continuar el embargo a Cuba.
Es la primera vez que actúa de esta manera en casi un cuarto de siglo, desde que en 1992 el bloque adquirió el carácter de ley con el propósito de continuar con el ahogo a la república caribeña comunista.
De los 193 países que forman parte de la ONU, 191 votaron en contra del bloqueo estadounidense a Cuba y dos naciones se abstuvieron: Estados Unidos e Israel. El año pasado, la votación tuvo idéntico número, salvo que en vez de abstenerse, ambos países votaron a favor del embargo.
La votación, la última con Obama en la Casa Blanca, ocurrió luego de que ambos gobiernos reestablecieran las relaciones diplomáticas el año pasado, un hecho histórico para la diplomacia contemporánea que fue impulsada por el Papa Francisco.
Obama y Raul Castro: una imagen impensada poco años atrás
Un gesto más simbólico que real
La abstención de Estados Unidos en la votación por el embargo a Cuba fue un hecho muy significativo, pero con poca injerencia real: la votación no es vinculante, y como el embargo es ley en Estados Unidos, depende del Congreso -de mayoría opositora a Obama- levantarlo o no.
El anuncio y la ovación
“La resolución que se vota hoy es un ejemplo perfecto de por qué la política estadounidense de aislar a Cuba no estaba funcionando”, afirmó Samantha Power, la embajadora de EE.UU. en la ONU, antes de anunciar la abstención estadounidense.
Samantha Powers, la embajadora de Estados Unidos en la ONU
“Estados Unidos siempre ha votado en contra de esta resolución, hoy se va a abstener”, dijo Power y todo el recinto estalló en un aplauso.
"En lugar de aislar a Cuba nuestra política aislaba a EE.UU. Incluso aquí, en Naciones Unidas", añadió la embajadora.