El periodista Rafael Henzel, uno de los seis sobrevivientes del accidente del vuelo de Chapecoense, habló por primera vez de la tragedia que terminó con la vida de 71 personas y cuestionó el accionar de los comisarios de abordo en los momentos previos al impacto de la aeronave en Medellín.
El periodista que sobrevivió al tráfico vuelo y contó detalles de los segundos finales.
“Siempre que les preguntábamos cuánto tiempo faltaba, ellos decían diez minutos. Y así cada vez que preguntábamos. De repente simplemente se apagaron las luces, el motor y todo el mundo volvió a su asiento”.
En ese sentido, el periodista reveló que “en ningún momento” desde la cabina les pidieron “que se abrocharan los cinturones de seguridad”. Y agregó: “Estábamos volando sin saber absolutamente nada de lo que iba a pasar, nadie podía imaginar que íbamos a golpear esa cerro”.
Henzel dijo que nadie les pidió abrocharse los cinturones de seguridad.
Es que mientras el piloto Miguel Quiroga solicitaba desesperado la prioridad de aterrizaje a la torre de control, los jugadores del Chapecoense seguían festejando su pase a la final de la Sudamericana. Jamás se enteraron de lo que sucedía, ni la tripulación los preparó para la colisión.
La tragedia los encontró por sorpresa, cuando el avión comenzó su indeclinable caída hacia la región de Cerro Gordo, a sólo 18 kilómetros de la pista en la que debían haber aterrizado de haber realizado la escala técnica para recargar combustible.
El vuelo de la tragedia terminó con la vida de 71 personas.
Henzel recordó que logró observar la preocupación en el rostro de la Ximena Suárez, la azafata que logró sobrevivir al vuelo. “Me di cuenta que había una gran angustia en su rostro, pero no recuerdo gritos, hubo un silencio tan asombroso”.
La tripulación, en la mira: cuestionan en plan de vuelo.
Por otra parte, el periodista fue muy crítico de la falta de preparación de la empresa Lamia para el vuelo: “Lo que más me impresionó es que el avión no se cayó por una falla mecánica, fue por falta de discernimiento, una persona que hizo una economía tonta. Es repugnante”.
Por último, el periodista, que aún se encuentra con asistencia médica en Colombia, aseguró que sueña con volver a pisar suelo chapecoense. “Agradezco los miles de mensajes de amor de los brasileños, no nos podemos quejar sobre este fin de año”, culminó.