17 Agosto de 2016 14:42
La jueza federal María Romilda Servini de Cubría investigará un caso de resonancia mundial: el asesinato del poeta Federico García Lorca, ocurrido en 1936 en España, hace nada menos que 80 años, a manos de la dictadura de Francisco Franco.
García Lorca: fue "pasado por las armas" según un informe de la policía de Granada.
Servini aceptó una denuncia de la entidad española Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica. ¿Por qué toma una jueza argentina una causa por el asesinato de un ciudadano español en España, presumiblemente ordenado o cometido por uno o más asesinos de origen español? Porque se entiende que el asesinato de Lorca puede ser considerado un crimen de lesa humanidad y, como tal, puede ser investigado y juzgado en cualquier parte del mundo.
Servini de Cubría libró un exhorto a España.
Según informa el diario español El Mundo, Servini aceptó hacerse cargo de la causa y libró un exhorto a la Justicia española a tal efecto. La Asociación encontró el año pasado un documento de la Jefatura de Policía de Granada, fechado el 9 de julio de 1965, que permitiría esclarecer el crimen. En el documento, Lorca es descripto como "socialista y masón", "perteneciente a la logia Alhambra", que le asignó el nombre "Homero".
El informe policial de apenas dos folios, conocido gracias a la cadena periodística SER, arrojó una nueva versión sobre el crimen, muy distinta de las que se conocían hasta ahora. "El Glorioso Movimiento Nacional le sorprendió en esta Capital" y fue "pasado por las armas" en "las inmediaciones de un lugar conocido como Fuente Grande", "después de haber confesado", dice el parte policial.
Documento de la Policía de Granada.
"Se significa que Federico García Lorca estaba tildado de prácticas de homosexualismo, aberración que llegó a ser 'vox pópuli', pero lo cierto es que no hay antecedentes de ningún caso concreto en tal sentido", agrega el informe.
Reverso del mismo documento.
Aunque el informe no lleva firma, el investigador especializado Miguel Caballero, autor del libro Las trece últimas horas en la vida de García Lorca, sostiene que probablemente su autor fuera Julián Fernández-Amigo Muñoz, inspector jefe de primera de la Brigada de investigación Social de Granada.
A él, precisamente, el gobernador de Granada le había pedido un informe sobre "la muerte del poeta", y la comisaría respondió con este informe tan atroz como singularmente preciso. "O lo hizo él, o lo mandó hacer y lo supervisó", opina Caballero, quien sin embargo, pone en duda que diga la verdad.
Excavaciones en Fuente Grande, en busca de los restos de Lorca.
La zona descripta en el informe fue sometida a excavaciones en noviembre de 2015, sin éxito. Luego el equipo de arqueólogos que trabajó pidió una segunda oportunidad y alegó que se había equivocado por apenas 20 metros.
