24 Septiembre de 2019 16:20
El norteamericano Steven Weber murió ahogado días atrás en lo que debería haber sido uno de los momentos más felices de su vida: mientras le proponía matrimonio a su novia durante unas vacaciones en Tanzania.
De la felicidad a la tragedia
Junto a su novia, Kenesha Antoine, se alojaron en Manta Resort, un lujoso hotel flotante en isla Pemba, en el océano Índico. Habían reservado cuatro noches en una habitación que tenía una estancia por encima de la superficie del agua y otra sumergida a unos 10 metros de profundidad.En el tercer día de su estadía, Weber decidió meterse al agua para hacer su propuesta de casamiento y Kenesha lo grabó desde la ventana que permite observar el paisaje submarino.
Muerte y misterio
Allí, puede verse a Steven (quien no lleva ningún tipo de equipamiento de buceo) sosteniendo una nota escrita a mano contra el vidrio en la cual se lee "no puedo contener la respiración lo suficiente como para decirte todo lo que amo de ti. Pero todo lo que amo de ti, ¡lo amo cada día más!". Acto seguido, saca de su bolsillo un anillo y nada fuera de cuadro.
Nada en el video hace sospechar que Weber estaba cerca de perder la vida pero desde el Manta Resort le confirmaron a la BBC que "se ahogó trágicamente mientras practicaba buceo libre en el exterior de la habitación sumergida".
"El giro más cruel"
Kenesha decidió publicar el video de la propuesta de matrimonio en su cuenta de Facebook lamentando que su novio "nunca llegó a escuchar su respuesta" que habría sido "sí, un millón de veces".
"Nunca pudimos abrazarnos y celebrar el comienzo del resto de nuestras vidas juntos, ya que el mejor día de nuestras vidas se convirtió en el peor, en el giro más cruel del destino que se pueda imaginar. "Trataré de consolarme con el hecho de que disfrutamos de las experiencias más increíbles estos últimos días que estaban en nuestra lista de cosas por hacer, y de que ambos estábamos tan felices en nuestros últimos momentos juntos", agregó.