Para aquellos que estén buscando unas vacaciones fuera de lo normal o quieran vivir su propia película de terror, la web BBC Mundo compiló los cinco lugares más terroríficos del mundo, en un repaso que va desde un templo habitado por ratas hasta un pozo que ha ardido en llamas durante 40 años.
Lago Roopkund (India)
El lago está sembrado de antiguos esqueletos.
Ubicado en las montañas del Himalaya, a más de 5.000 metros de altitud, el lago Roopkund fue escenario, en el siglo IX, de la muerte de cientos de personas cuyos esqueletos aún permanecen allí.
Los huesos comienzan a verse en el mes de deshielo.
Según especialistas, el grupo habría muerto a causa de una feroz granizada y, considerando el difícil acceso al lugar, nadie se molestó en darles sepultura. Los huesos son visibles sólo durante un mes añl año, cuando el hielo que rodea al lago se derrite.
Queimada Grande (Brasil)
Una de las 4.000 serpientes que viven en Queimada Grande.
Conocida como Isla de las Cobras, Queimada Grande es el hogar de cerca de 4.000 ejemplares de Bothrops insularis, una de las serpientes más venenosas del mundo. Ningún humano se ha atrevido a establecerse en el lugar, por lo cual los ofidios son sus únicos habitantes.
El veneno de la Bothrops insularis es tanto neurotóxico (afecta al sistema nervioso central) como hemotóxico (causa muerte del tejido muscular).
El templo de Karni Mata (India)
El templo está habitado por miles de ratas sagradas.
A pesar de que está plagado de ratas, miles de peregrinos y turistas visitan todo el año el templo indio de Karni Mata, en la región de Rajasthan.
En el templo, las ratas son cuidadosamente alimentadas.
Las ratas, más de 20 mil, son sagradas y alimentadas cuidadosamente por los guardianes del templo con leche, semillas, cáscaras de coco y dulzuras especialmente preparados para ellas. Y, a raíz de la creencia de que la comida que las ratas mordisquean trae buena suerte, algunos peregrinos religiosos comen las sobras.
La puerta del infierno (Turkmenistán)
El pozo gasífero ha ardido durante más de 40 años.
En 1971, un pozo de gas colapsó en el desierto de Karakum, en Turkmenistán, y los obreros rusos que trabajaban en él le prendieron fuego pensando agotar así su contenido. Sin embargo, el hueco jamás dejó de arder y aún lo hace hasta el día de hoy.
Así, nació el lugar que fue muy apropiadamente bautizado como La Puerta del Infierno, el cual mide 60 metros de ancho y alrededor de 20 de profundidad.
La isla de las muñecas (México)
La isla se ubica en los canales de Xochimilco.
Localizada en los canales de Xochimilco, en Ciudad de México, esta isla repleta de tenebrosas muñecas es responsabilidad de Julián Santana, quien llevado por la superstición comenzó a colgar los juguetes en los árboles convencido de que lo protegían del espíritu de una niña que se había ahogado en la zona.
Muchas de las muñecas fueron halladas en la basura.
A medida de que la isla fue haciéndose famosa entre los curiosos, Santana dejó de utilizar las muñecas que encontraba en la basura y comenzó a recibir varias de regalo de manos de los visitantes que se acercaban a ver su terrorífica obra. El hombre murió en el 2001, y actualmente las muñecas son un gran punto de atracción turística.