28 Noviembre de 2016 12:20
Y en eso llegó Fidel, cantaba Carlos Puebla tras el triunfo de la Revolución. La canción hablaba de cómo el desembarco de los “barbudos” en el poder había llegado para reivindicar al país, hasta entonces considerado hasta por los propios cubanos como un “garito”. Nadie sabe qué sucederá ahora tras la muerte de su comandante en jefe, lo único que se sabe es que la isla despedirá a Castro con un tributo de una semana que comenzó hoy mañana en La Habana.
Miles de cubanos hicieron fila desde las nueve de la mañana en la Plaza de la Revolución para poder desfilar frente a un retrato de Fidel, adornado con flores y con sus medallas de guerra. Pese a que fue el primero de siete homenajes organizados por el Gobierno, ninguna fuente oficial del Concejo de Estado, encargado de la organización del tributo, confirmó si las cenizas de Castro se encontraban allí. En simultáneo con el inicio de la procesión popular, se dispararon 21 salvas de artillería en la capital y en la ciudad de Santiago de Cuba, en donde finalmente descansarán.
La primera despedida fue para el pueblo, la oficial, para jefes de Estado, llegará mañana a las 19, también en la Plaza de la Revolución de La Habana. Se espera la presencia de los presidentes Nicolás Maduro, Evo Morales, Daniel Ortega y Rafael Correa, además de la del rey emérito de España, Juan Carlos.
Una multitud hizo fila para poder despedir a Castro en la Plaza de la Revolución.
El miércoles comenzará el turno de la procesión de tres días que llevará sus cenizas de oriente a occidente. Porque, aunque Castro nació en la provincia de Birán, la ciudad de Santiago fue en la que hizo sus estudios primarios y tuvo una participación clave en el desarrollo de la revolución cubana.
El último de los homenajes tendrá lugar el sábado a las 19, con un acto en la plaza Antonio Maceo de Santiago. Doce horas después, sus restos serán inhumados en el cementerio de Santa Ifigemia, el mismo en el que descansan los de José Martí.