01 Abril de 2017 10:51
Ante el pedido del presidente venezolano, Nicolás Maduro, el Tribunal Supremo de Justicia venezolano (TSl Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela (TSJ) suprimió dos sentencias que le restaban fueros y atribuciones al Parlamento, y que establecían que el propio TSJ asumía las funciones de la Asamblea Nacional. En la práctica, la medida implicaba la disolución del Congreso en ese país.
Maduro, reunido con su Consejo de Defensa.
La sentencia mantiene la autorización al poder Ejecutivo para la creación de empresas mixtas (es decir, con participación estatal y privada) sin la necesidad de que lo autorice la asamblea.
La fiscal general venezolana Luisa Ortega Díaz, había advertido que las sentencias del TSJ implicaban una ruptura del orden constitucional. Y varios países cuestionaron el paso dado, incluyendo la Organización de los Estados Americanos (OEA), a través de su secretario general Luis Almagro, y otros tradicionales aliados de Venezuela, como Cuba.
Ahora mismo se reúnen en Buenos Aires los cancilleres de los países integrantes del Mercosur para analizar la crítica situación venezolana, que a partir de esta marcha atrás, al menos empieza a descomprimirse un poco. Ayer, el Consejo de Defensa encabezado por el propio Maduro le había pedido al TSJ que revisara las sentencias con el propósito de mantener la estabilidad institucional. Ni oficialistas ni opositores creen que la decisión del TSJ haya sido autónoma, sino que surgió a partir del profundo vínculo entre el Poder Judicial y el Ejecutivo en Venezuela.
Consejo de Defensa de la Nación de #Venezuela declara superada diferencia entre Poderes Públicos https://t.co/ea1kh2DTmd pic.twitter.com/Tu9bdIt6gy
- teleSUR TV (@teleSURtv)
Sin embargo, la oposición desconfía de la súbita "buena voluntad" del presidente venezolano. Es que, pese a que es mejor que el Parlamento funcione a que no funcione, el propio mecanismo de la "marcha atrás" devela la estrecha dependencia entre los poderes, ya que finalmente el TSJ hace lo que Maduro le indica. El presidente de la Asamblea, Julio Borges, calificó el Consejo de Defensa como un "circo" para fingir normalidad en el país y pidió salir a las calles a protestar.
"No la hay. Nicolás Maduro dio un golpe de Estado", dijo en su cuenta de Twitter. "Ahora que el mundo entero nos acompaña los venezolanos debemos salir a las calles a exigir respeto a la Constitución", expresó.