Ocurre una vez cada millones de veces. Y es impresionante. El niño salió del útero materno, pero no de la bolsa. ¿Cómo es posible esto? Luego de la césarea, la bolsa no se rompió. Y, por lo tanto, siguió recibiendo nutrientes y oxígeno desde el cordón umbilical.
Los obstetras dejaron que el bebé siguiera haciendo su "trabajo" solo, como si hubiera decidido darse unos minutos más antes de empezar a vivir de este lado, antes de romper bolsa, antes de, en fin, vivir "afuera", de este lado del mundo. No hay mayores datos respecto de fecha o lugar. A decir verdad, no importa. Lo único importante es esa vida que se abre camino entre nosotros.