Los periodistas que recibieron la invitación de John Lennon y Yoko Ono el 25 de marzo de 1969 deben haberse sentido particularmente intrigados. El Beatle y la artista japonesa habían contraído matrimonio apenas unos días antes en Gibraltar y ahora los convocaban misteriosamente a una habitación de hotel en el Hilton de Amsterdam. 

La plácida escena con la que se toparon los periodistas. 

Teniendo en cuenta que habían posado desnudos en la tapa del álbum Two Virgins, varios de ellos sospecharon que terminarían siendo testigos de una escena sexual de puro amor libre. Sin embargo, se toparon con algo tal vez más simple pero mucho más significativo. 

Enfundados en discretos pijamas, John y Yoko estaban sentados plácidamente en una cama de dos plazas, rodeados de ramos de flores. En el ventanal detrás de ambos, dos carteles anunciaban los lemas "Bed peace" ("paz en cama") y "Hair peace" ("paz de pelo", un juego de palabras con el término en inglés "hairpiece" que significa "peluquín"). 

"Les enviamos una tarjeta que decía 'vengan a la luna de miel de John y Yoko'. ¡Deberían haber visto las caras de los periodistas y camarógrafos peléandose por entrar a la habitación!", recordaba el artista en el documental Anthology. "Sus mentes estaban llenas de lo que fuera que pensaban que iban a pasar. Y cuando entraron, se decepcionaron. Estábamos en la cama como dos ángeles, totalmente vestidos. La cama era sólo un accesorio". 

La pareja había despertado gran atención en la opinión pública, que los juzgaba duramente por su relación: ambos estaban casados cuando la comenzaron, y Yoko como artista conceptual provocadora, mujer y asiática era blanco de toda suerte de prejuicios agresivos. 

John y Yoko el día de su boda. 

Ambos decidieron utilizar esa fascinación externa para un objetivo político, impulsando su agenda pacifista frente a la guerra de Vietnam, que recrudecía a causa de la sombra de la derrota que sobrevolaba al ejército norteamericano. 

La habitación de hotel en Amsterdam se convirtió entonces en una especie de oficina donde Lennon y Ono recibieron a la prensa durante ocho horas al día durante una semana entera para dialogar sobre su postura ideológica.

"La gente se preguntaba '¿de qué le sirve ésto a la paz?'. Nosotros pensamos que el otro lado tiene a la guerra todos los días no sólo en las noticias sino también hasta en las películas: guerra, guerra, guerra, muerte, muerte, muerte. Entonces dijimos 'Pongamos algo de paz, paz, paz, en los titulares'. Es bastante divertido que varios de los titulares del 25 de marzo de 1969 digan 'Pareja de luna de miel en la cama'. ¿Acaso no es una excelente noticia?", reflexionó John. 

Durante una semana, la pareja atendió a la prensa. 

Al mismo tiempo, Lennon no dejaba de ver al asunto con una mentalidad comercial: para él, estaban vendiendo un producto y ese producto era la paz. "Para vender algo necesitás un truco, y la cama fue el truco que se nos ocurrió. Nos llevo un largo rato idear la manera de conseguir la mayor cantidad de publicidad para algo en lo que creemos sinceramente", explicó. 

Romance de ideas

Esta mezcla de performance de arte y hecho político fue otra instancia más de la poderosa influencia que Ono tuvo sobre Lennon en su esfera espiritual y artística.

"Ella me enseñó todo lo que sé", supo decir Lennon sobre Ono. 

Luego de casarse con la artista japonesa y, más tarde, cuando se convirtió junto a ella en padre de Sean Ono Lennon, John se inclinó poco a poco hacia una vida más tranquila y hogareña, en la cual muchas veces cumplía alegremente el rol de amo de casa, cocinando y cuidando a su hijo. Para un hombre abiertamente machista como lo había sido el músico, este constituía un gran paso. 

"La nuestra es una relación de maestra y pupilo. Eso es lo que la gente no entiende", subrayó alguna vez Lennon. "Soy el famoso que se supone que tendría que saber todo pero en realidad ella me enseñó todo lo que sé". 

Paralelamente, Ono también le dio crédito a su marido en un camino vital donde claramente ambos se retroalimentaron. "Creo que las mujeres tenemos sabiduría interior y los hombres, la sabiduría de lidiar con la sociedad, ya que ellos la crearon", reflexionó ilustrando el intercambio de aprendizajes.