En las próximas horas, en los tribunales de Dolores, se dará inicio a los alegatos por el asesinato de Fernando Báez Sosa, ocurrido el 18 de enero de 2020 en Villa Gesell, tras el ataque de acusados Máximo Thomsen (22), Enzo Comelli (22), Matías Benicelli (23), Blas Cinalli (21), Ayrton Viollaz (23), y Luciano (21), Ciro (22) y Lucas Pertossi (23). Pero hubo una novedad con los imputados. Thomsen, el más complicado de los imputados, pidió asistencia psicológica.
El joven tuvo un encuentro con una profesional de la salud mental en la cárcel de Dolores. Específicamente, la sesión se desarrolló en un pabellón contiguo a la celda 8 del Pabellón 1. Esa zona se encuentra alejada del pabellón común por la peligrosidad que implica para los rugbiers el resto de la población carcelaria.
Hasta ahora, Thomsen fue el único de los imputados que pidió tener un encuentro con la psicóloga del penal. El encuentro fue después de las dos horas de “recreo” en el patio interno de la prisión. Según Télam, el encuentro se dio por cuestiones de “ansiedad” y calificaron la charla con la profesional como “buena”.
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En ese sentido, los voceros del Servicio Penitenciario también informaron que los presos cuentan con un seguimiento tanto médico como psicológico durante las 24 horas y que los profesionales están disponibles en todo momento. No es la primera vez que Thomsen necesita asistencia médica durante estos últimos tres años.
Antes de ser trasladados a Dolores por el juicio, el joven contaba con sesiones semanales con un psicólogo en la cárcel de Melchor Romero. Además, en noviembre de 2022, Thomsen debió ser trasladado a una clínica privada para ser sometido a una cirugía programada ya que tenía una hernia inguinal.
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En tanto, el miércoles desde las 9, en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 de Dolores comenzarán los alegatos. Los primeros en exponer serán los fiscales de juicio, Juan Manuel Dávila y Gustavo García. Más tarde lo harán los abogados Fernando Burlando, Fabián Améndola y Facundo Améndola, representantes de los padres de Báez Sosa, Silvino Báez y Graciela Sosa. La acusación es “homicidio agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas” y la pena que piden será de prisión perpetua.
El jueves será el turno en que la defensa de los rugbiers realice los alegatos frente a los jueces María Claudia Castro, Christian Rabaia y Emiliano Lazzari. El abogado Hugo Tomei será quien tomará la palabra e intentará que la acusación sea por “homicidio en riña o agresión”, que prevé una pena de entre 2 a 6 años. Los ocho acusados también podrían hablar. El veredicto final se dará el 31 de enero.