15 Junio de 2017 11:02
Menos de una semana después de que Paola Cuartara, residente en la localidad cordobesa de Pilar, llamara al número de emergencias 101 para confesar el asesinato de su hijo, las teorías alrededor del caso son cada vez más siniestras.
La propiedad donde fue hallado el cuerpo (Foto: La Voz del Interior).
El día de la revelación, la mujer en persona guió a la policía hacia la construcción abandonada donde se encontraban los restos de Luciano, de cuatro años. El cuerpo ni siquiera había sido enterrado y, según fuentes de la investigación citadas en el diario La Voz del Interior, "lo habían dejado como sentado".
Abuso sexual y magia negra
Cuartara dijo haber matado al niño empujada por una profunda depresión causada por el fallecimiento súbito de otro de sus hijos. De acuerdo a su relato, asfixió a Luciano luego de atarle las manos.
Pero los investigadores sospechan que Paola no actuó sola y que está encubriendo a alguien. Además, aún no pudieron establecer fehacientemente si la mujer sufre de problemas psiquiátricos o si -como aseguran vecinos de la zona- fue abusada sexualmente.
El cuerpo fue hallado hace menos de una semana en un paraje rural.
"Tienen que estar dispuestas a declarar esas personas que dicen eso", le declaró a La Voz la fiscal de Río Segundo, Patricia Baulies. "Si me tiran una punta voy a hacer examen de ADN y si me sale uno positivo voy a hacerle a todas las hijas de las hermanas de Paola. Es importante determinar las circunstancias en las que la mujer hizo esto, porque sería un atenuante para su pena".
Al mismo tiempo, Baulies no descartó una impactante teoría que ronda al pueblo: que Luciano fue víctima de un asesinato ritual. "No me extrañaría lo del sacrificio", expresó. "Hay quienes dicen que el padre de Paola se dedica la magia negra".
La fiscal Baulies no descarta que Luciano haya sido asesinado en el marco de un ritual.
Esta hipótesis fue abonada por vecinos de la zona que aseguraron que, días antes de que se encontrara el cadáver, encontraron varias gallinas colgadas en el lugar del hallazgo.
Dudas familiares
Consultada por La Voz, Noelia, hermana de Paola, negó que su padre haga magia negra. "Es parapsicólogo y ayuda a la gente", dijo en su defensa. Tanto ellas como sus tres hermanas vivían con él luego de que se separara de su madre hace casi 20 años.
"Paola nos dijo que Luciano estaba en San Luis con su padre", agregó Noelia. "Hacía varios meses no lo veía, pero le creí. El otro día vino a visitarnos y nos dijo que había matado a Luciano; después se lo dijo a la Policía".
En el pueblo de Pilar circulan varias teorías.
Incluso el origen biológico de Luciano está en duda. Cuando nació el niño, Paola estaba en pareja con un hombre de apellido Ferreyra, quien asumió que era su hijo.
Sin embargo, luego comenzó a dudar de la filiación, por lo cual la familia se sometió a un análisis de ADN que confirmó las sospechas: Ferreyra no era el padre y esa revelación lo llevó a separarse de Paola.