29 Septiembre de 2023 17:54
Un hecho de horror sucedió en la mañana del viernes en Ingeniero Budge, perteneciente a Lomas de Zamora. Un femicidio más que sucede y otra mujer que muere en manos de la violencia machista. “Acabo de matar a mi mujer”, dijo el asesino y se entregó. El cuerpo de ella presentaba múltiples golpes.
A sangre fría y como un trámite. Un hombre de 55 años, identificado como José Luis Torres se acercó a la comisaría seccional número 10 de la localidad bonaerense para entregarse por haber cometido un homicidio en su casa horas antes. Ingresó, se presentó y sin más vueltas le confesó a los efectivos policiales: “Acabo de matar a mi mujer”.
Se le tomó la declaración, se supo en dónde cometió el asesinato y qué hizo con el cuerpo, aunque no brindó más detalles. Tras quedar detenido en el mismo acto, fue llamado a entrevistarse con la defensa oficial pero el mismo se negó a declarar y a brindar más información sobre lo hecho.
Dos repartidores salvaron a un nene de caer de un balcón: el video del tremendo momento
La víctima en cuestión fue identificada como Nélida Pozo de 49 años. Su cuerpo fue encontrado por los efectivos policiales y tras las pistas dadas del femicida en el patio de una casa ubicada en la calle Baradero al 1800 de Ingeniero Budge, donde resta saber si también la asesinó ahí mismo o si sucedió en otro lugar y la trasladó.A simple vista, los oficiales corroboraron que presentaba múltiples golpes y luego, el médico legista informó que la víctima tenía una gran cantidad de traumatismos en la cabeza, en su rostro y en un brazo y tras ver el cuerpo evidenció que fue atacada a machetazos con un pico de albañil y un destornillador. Aun así, aquellos objetos no fueron encontrados en el lugar.
Luego de haberse entregado en la comisaría como el responsable del femicidio, Torres fue arrestado en el momento y se le inició una causa por el delito de “homicidio agravado”. La misma, quedó bajo la investigación del fiscal José Luis Juárez, que es titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 12 Especializada en Violencia de Género del Departamento Judicial Lomas de Zamora y además, es quien dispuso la aprehensión del imputado y ordenó la autopsia correspondiente que se realizará en las próximas horas para evidenciar de qué más falleció Pozo.
El viernes por la mañana, también se dio a conocer de otro femicidio que había sucedido en las últimas horas del día anterior. Una mujer de 37 años fue asesinada por su pareja, quien le dio seis puñaladas en la entrada de su vivienda en la localidad de Venado Tuerto, en la provincia de Santa Fe.
Pagaba $30.000 por cada persona asesinada para "generar miedo": así operaba el "rey narco" de Rosario
El hecho ocurrió cuando Stella Maris Eidner fue atacada a metros de su vivienda en el barrio Iturbide, donde convivía con su esposo hacía 20 años y junto a sus dos hijos, de 15 y 17 años. El agresor, Marcelo Iván G de 43 años, después de lo ocurrido escapó por los techos de la casa de su suegra para evitar ser detenido y se dirigió a su trabajo, en una planta cerealera que se ubica a pocas cuadras del lugar. Más tarde, declaró como testigo.
En el momento en el que fue embestida, la víctima empezó a gritar pidiendo ayuda y logró despertar a uno de sus hijos que estaba durmiendo. Cuando el joven salió de su casa para ver qué es lo que estaba pasando, intentó auxiliar a su mamá, pero la mujer terminó muriendo en sus brazos. Lo único que pudo divisar el adolescente fue a una persona que se escapaba del lugar, pero no logró identificarla.
Ante las grabaciones y contradicciones del esposo, Raposo ordenó su detención. Iván tenía cortes en un dedo y gotas de sangre en uno de los zapatos que usaba para su trabajo. Luego de investigaciones, encontraron el arma que fue utilizada para cometer el femicidio en la planta cerealera. El encargado de la planta le confirmó al fiscal que Iván había ido a trabajar el mismo día que se cometió el crimen.