De una gira deportiva por Argentina a la cárcel sin escala. Oscar Jégou y Hugo Auradou, los jugadores de la Selección de rugby de Francia imputados por atacar sexualmente a una mujer, pasaron el primer fin de semana como detenidos en Mendoza.
La victima de 39 años no dudó en denunciar y, aunque el abogado de los deportistas salió a declarar que creía en la "inocencia" de sus clientes, la justicia se encuentra investigando lo ocurrido aquella noche luego del partido que pondría fin a la carrera de los acusados.
Jégou y Auradou estuvieron el fin de semana en la Estación Transitoria de Detenidos y Aprehendidos del Polo Judicial. Allí pasaron los días alojados en un calabozo de 6 metros, diseñado para el establecimiento de tres personas como máximo. Antes, pasaron por la requisa como todo preso y por la enfermería. Con esto, se aseguran que los jugadores de Francia no obtengan ninguna ventaja con respecto al resto de la población carcelaria.
En el calabozo, los rugbiers de Les Bleus tienen prohibido recibir visitas y están completamente incomunicados. Es decir, el fin de semana sólo pudieron hablar entre ellos y con sus respectivos abogados.
Fue recién el lunes cuando se los trasladó al sector de detenidos e imputados, que depende del Servicio Penitenciario. Luego deberían seguir arrestados en una de las penitenciarías de la provincia y allí recién podrían tener visitas.
Los jóvenes de 20 y 21 años ya no se encuentran solos en tierras mendocinas. En las últimas horas, sus familiares llegaron a esa provincia para conocer los detalles de la causa. Además, comenzaron en la búsqueda de una casa donde alojarlos, en caso de que la Justicia les otorgue la prisión domiciliaria, por lo que su defensa trabaja incansablemente. Por el momento, los deportistas no pudieron ver a sus familias y explicarle lo sucedido aquella noche en la habitación del hotel.
¿Cuál es el estado de la denunciante?
La denunciante está representada por su abogada Natacha Romano que contó que su defendida estaba en un boliche que es donde conoció a Auradou que le ofreció algo para tomar. La víctima contó que se emepezó a sentir mal y fue el rugbier quien le ofrece llevarla al Hotel Diplomatic donde se encontraban alojados.
Romano contó: "Al llegar al hotel y sin mediar palabras, el principal agresor, Jégou que comete el primer acto de abuso sexual", dijo y agregó: "A los 40 minutos ingresa en la habitación el segundo rugbier, Auradou. Quien le abre la puerta es Oscar, la víctima no estaba en conocimiento de que iba a entrar. Y de inmediato esta persona comienza a abusarla, lo hacen los dos al mismo tiempo. Ella declara que entró en shock. Que el primer atacante intentó ahorcarla y que lo mismo hizo el segundo. Es evidente que tenían el mismo modo de actuar y agredir a la víctima".
Los rugbiers están detenidos con la carátula de "abuso sexual gravemente ultrajante agravado por la participación de dos o más personas". Y, sobre esa noche en particular la letrada contó: "El hecho se dio en la madrugada del domingo y fue denunciado a las seis o siete de la tarde. La declaración fue larga y extensa, y se corresponde con las constataciones del Cuerpo Médico Forense. Hay elementos contundentes. Además del abuso, estamos hablando de una mujer que fue brutalmente golpeada. Los dos sujetos participaron de una golpiza brutal. Ella está muy mal, muy golpeada; físicamente deteriorada".
Mientras los rugbiers pasan sus días detenidos y lejos de sus familiares. La denunciante también pasa un infierno internada en un centro de asistencia producto de su estado de salud agravado.
Los abogados de la mujer son los encargados de difundir su parte: tiene una úlcera ocasionada por la ingesta de calmantes para estabilizar su cuadro emocional. Además, presenta varias lesiones en el rostro, en la cabeza y en uno de sus ojos por lo que debe estar sedada para soportar los dolores.