05 Septiembre de 2016 14:36
Adrián Almaraz, supuesto jefe de la quiniela clandestina en el Conurbano de la provincia de Buenos Aires, denunció hoy que en esa actividad resulta “obligado coimear a la Policía bonaerense”, y admitió que los efectivos lo visitaban “una vez por mes” para retirar sobres con dinero. Además, sostuvo que “el Gobierno anterior no los atacaba” y los “dejaba trabajar”.
“No voy a dar nombres, pero esto lo saben todos: a la policía se le da algún 'arreglo'”, reconoció quien está sindicado como el “capo” del juego clandestino bonaerense, a quien le allanaron su domicilio en la Zona Oeste, donde funcionaba una agencia de juego clandestino.
Lo saben todos, a la policía se le da algún arreglo
Almaráz sostuvo que los presuntos sobornos a la fuerza de seguridad han sido generalizados, al manifestar que “lo que pasa acá pasa en todos lados”, y aseguró que “los sobres con plata se repartieron a todos los policías, los de antes y los de ahora”.
“Estás obligado a coimear a la policía”, remarcó el supuesto organizador de las apuestas prohibidas, y aseguró que “seguramente esa plata iba para arriba”. Sin embargo, rehusó dar detalles al decir que “yo no sé para quién iba”.
Adrián Almaráz se inició en la actividad "levantando apuestas por la calle".
Almaráz confesó que “el gobierno anterior no nos atacaba, nos dejaba trabajar porque buscaban la manera de cómo ubicarnos”, al tiempo que explicó que “había un proyecto de legalización de las agencias clandestinas”.
El Gobierno anterior no nos atacaba, nos dejaba trabajar
"Por eso nos mandaron a (hablar a Gustavo) Menéndez, ahora intendente de Merlo", agregó.
“El poder político anterior al ver y conocer la situación real estaba tratando de blanquearnos, llegó el nuevo gobierno y nos sacaron cagando”, se lamentó, y denunció que detrás suyo “hay 400 familias que se quedaron sin trabajo”.
Parte del dinero secuestrado durante el operativo en su casa. Foto: La Cornisa.
Por último, contó que comenzó levantando apuestas “por la calle” y después se puso “a agarrar más juego”.
“La quiniela clandestina existe hace más de 100 años”, expresó, y consideró que “ningún policía te va a llevar a un levantador de quiniela preso porque es el tipo más sano que hay”.