Condenada a cadena perpetua por el crimen de su novio, Fernando Pastorizzo, desde la cárcel Nahir Galarza lanzó un nuevo emprendimiento: vende pulseras y cadenitas con dijes para recaudar fondos con fines solidarios.
"Tenía materiales para armar pulseras tanto de acero quirúrgico como de hilo encerado porque es algo que me gusta hacer. Regalaba a mi familia y a compañeras. Después me pedían que les haga para regalar a sus familias y me pagaban", relató en redes sociales.
Galarza aseguró que "toda la recaudación es para un fondo destinado a hacer donaciones a distintos lugares de Paraná y poder ayudar a personas que lo necesiten".
"Cuando empezó la cuarentena se hizo más evidente la necesidad que pasan algunas personas. Me propuse que debía ayudar con lo que tuviera a mi alcance", agregó.
La compañera de celda de la joven la ayuda a confeccionar los accesorios, y su madre se encarga de proveerle materiales y manejar las ventas desde Facebook.
"No les importa lo que realmente soy"
En diálogo con radio Dos de Corrientes, Galarza además volvió a lamentarse de la representación que los medios hacen de ella. "Muestran de mi lo que quieren, lo que realmente soy ni les importa", señaló.
"Me siguen condenando por algo que nadie quiere admitir. Asesino es el que mata por placer, mi situación no fue así, ni el contexto ni el día del hecho", agregó sobre el homicidio de Pastorizzo. "Las personas que conocí, internas, compañeros de facultad, abogados, personas que me llaman, siempre me dicen que no soy lo que esperaban: Teniendo esa imagen de antemano se dan cuenta que soy todo lo contrario, sólo me juzgaron por mi apariencia".