20 Abril de 2021 10:21
Un joven venezolano es intensamente buscado como el principal sospechoso del femicidio de su pareja, quien fue asesinada de 40 puñaladas con una cuchilla el domingo último en su departamento del barrio porteño de Flores.
El brutal hecho sucedió el pasado domingo cerca de las 19.30 en un edificio de la calle Yerbal al 2900, a donde la policía arribó después de que el personal de la Comisaría Vecinal 7C fuera alertado sobre la presencia de mujer herida de arma blanca, identificada como Mayerling.
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Al llegar, los oficiales se entrevistaron con una mujer de nacionalidad venezolana, quien contó que al arribar al departamento se cruzó con su hermano, también venezolano y de 28 años, quien estaba junto a su hijo de 3 años.José Antonio Rangel Moyeton le dijo que se iba porque había mantenido una discusión con su pareja, pero cuando la hermana del sospechoso ingresó a la casa, halló a su cuñada ya sin signos vitales, entre dos camas que había en una habitación.
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El relato de la cuñada fue avalado más tarde por el video de una cámara de seguridad del edificio que captó el momento en el que Moyeton abandonó el lugar, tal cual ella lo dijo, y hasta el momento las autoridades no lograron ubicarlo.La víctima presentaba varios cortes y junto a su cuerpo había una cuchilla con manchas de sangre. Según contó el hermano de la víctima, la joven y su novio estaban en pareja hacía 6 años, aunque las cosas entre ellos no estaban nada bien. “La amenazaba con que la mataría si ella lo dejaba”, se lamentó.
En diálogo con el portal venezolano Es Reviral, su hermano Manuel contó que la víctima y el sospechoso se conocieron en Barinas y que como él consiguió trabajo como barbero en Argentina, los dos dejaron su país para empezar una nueva vida.
“Ella buscaba un mejor futuro, progresar, salir adelante”, explicó, y agregó que el problema era que Rangel Moyeton era violento y siempre la amenazaba de muerte.
El Juzgado Criminal y Correccional 35, a cargo de Osvaldo Rappa, quedó a cargo de la investigación y ordenó la intervención de la División Homicidios de la Policía de la Ciudad para dar con el paradero del imputado por el delito de “femicidio”, que prevé una pena de prisión perpetua.
