El caso de Loan Peña, el nene de cinco años desaparecido el 13 de junio en la localidad de 9 de Julio, Corrientes, sigue dando qué hablar. De acuerdo con el abogado de la familia, al menos cuatro lagunas van a ser rastrilladas luego de confirmarse que durante la paupérrima investigación que se llevó adelante desde un principio no fueron analizadas. Incluso, existe la posibilidad también de que alguna de ellas sea vaciada para una mayor precisión de los resultados. "Existen procedimientos previos a esa determinación. Rastrillaje y búsqueda acuática bajo la dirección de SIFEBU, es decir, lo que debió hacerse anteriormente y no se hizo", detalló el abogado Juan Pablo Gallego.
Al ser consultado sobre la probabilidad de que se vacíe alguna de las lagunas, el abogado de la familia Peña destacó: "Bajo los procedimientos y protocolos de SIFEBU debe cumplirse cada paso y dar cuenta de ello a la jueza, que ha entendido es que ese rastrillaje inicialmente se hizo mal". Se supo que una de las lagunas está cercana al campo de María Victoria Caillava y Carlos Pérez, dos de los detenidos que tiene la causa.
Aunque no hay fecha de cuándo se va a realizar dicha inspección, Gallego sostuvo que "la medida está dispuesta" y que se aguarda a que "lleguen los recursos para su desarrollo". Ahora, la Justicia tiene que notificarlos una vez habidos los recursos para poder así comenzar con los operativos. Mientras tanto, los padres de Loan, José Peña y María Noguera, reclamaron que su hijo vuelva "sano y salvo". "Todos deben decirnos qué hicieron con Loan ese día", expresaron.
La pareja estuvo en A24, donde remarcaron: "Todos son culpables". "¿Cómo no van a saber dónde está?", se preguntó María entre lágrimas, y agregó: "Quiero saber algo de Loan, estamos sufriendo, es mucho dolor, quiero que vuelva sano y salvo". Por su parte, Gallego apuntó contra la supuesta responsabilidad de Macarena Peña y Camila Peña, dos de las primas del pequeño Loan, al alegar que "tienen conocimiento de los hechos".
El letrado dio una entrevista en el programa Poco Correctos de El Trece, exponiendo graves irregularidades en la investigación y reforzando teorías estremecedoras sobre el caso. Según denunció públicamente, Carlos Pérez, uno de los principales sospechosos, tendría un historial pericial alarmante relacionado con conductas sexuales hacia menores, lo que podría vincularlo con la desaparición de Loan. De acuerdo con Gallego, Pérez y su esposa María Victoria Caillava ostentan un poder considerable en la región, lo que dificultó el avance de la investigación. Estas acusaciones refuerzan la hipótesis de que hay encubrimiento y una red de impunidad en 9 de Julio.
José Mazzei, perito de parte, reveló que existen cuatro lagunas cercanas al lugar donde desaparecieron. Loan que aún no han sido rastrilladas, a pesar de su importancia estratégica. Entre ellas:
- La laguna en el predio de Carlos Pérez y María Victoria Caillava: Este punto, según Mazzei, es crucial para la investigación, pero no ha sido revisado por motivos desconocidos.
- Laguna paralela al campo de Abundio Escobar: Escobar declaró haber escuchado a un niño gritar "mamá" en tres ocasiones la noche de la desaparición, pero este testimonio no fue explorado a fondo.
- Dos lagunas al norte y noreste del lugar donde se encontró una zapatilla de Loan: Estas áreas no han sido inspeccionadas, a pesar de estar cerca de una prueba clave.
Además, Mazzei criticó la falta de exhaustividad en las búsquedas, señalando que, aunque no se puede confirmar que Loan esté en alguna de estas lagunas, descartarlas es esencial según el protocolo.
Los detalles del caso Loan
Loan fue visto por última vez en un naranjal cercano a la casa de su abuela paterna, Catalina Peña, en el paraje rural Algarrobal. Su desaparición, inicialmente tratada como un extravío, derivó en una compleja investigación que apunta a la posible implicación de una red de trata infantil, con múltiples detenciones y el traslado de la causa a la Justicia Federal. Loan desapareció tras un almuerzo familiar organizado en la casa de su abuela. Al evento asistieron varios adultos, incluyendo su tía paterna Laudelina Peña, su tío Antonio Benítez, y el matrimonio formado por Carlos Pérez y María Victoria Caillava, quienes son ahora los principales sospechosos.
Después del almuerzo, un grupo de adultos y niños, incluido un préstamo, se dirigió a un naranjal cercano. Allí fue visto por última vez. Horas después de notar su ausencia, se realizaron llamadas y búsquedas en la zona, pero sin éxito. Al día siguiente se activó la Alerta Sofía, un protocolo de emergencia para desapariciones de menores, y días más tarde, Interpol emitió una alerta amarilla internacional. Las primeras detenciones se realizaron el 15 de junio, cuando Antonio Benítez, Daniel Ramírez y Mónica Millapi fueron acusados de abandono de persona. Posteriormente, la investigación tomó un giro al encontrar rastros de Loan en vehículos pertenecientes a Pérez y Caillava.
Esto los convirtió en los principales sospechosos de haber entregado al niño a una red de tráfico infantil. La fiscalía también detuvo al comisario Walter Maciel por encubrimiento, acusándolo de plantar pruebas falsas, como una zapatilla del niño que apareció en un lugar incompatible con los hechos. Un punto crítico en la investigación fue la aparición de rastros biológicos en los vehículos de Pérez y Caillava, aunque no se confirmó que fueran de Loan. Además, declaraciones contradictorias por parte de Laudelina Peña complicaron aún más el caso. Si bien inicialmente aseguró no saber nada del paradero del niño, luego afirmó que Loan había sido atropellado accidentalmente por Pérez y Caillava, una versión que posteriormente admitió haber inventado tras presiones y haber recibido sobornos.
El 24 de junio, la Justicia de Corrientes se declaró incompetente y la causa pasó al fuero federal debido a la gravedad del caso y la posible implicación de redes internacionales de trata. La Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex) trabajó en la investigación, desplazando a las autoridades provinciales. A nivel internacional, países como Paraguay y Uruguay han intensificado la búsqueda, sumándose a los esfuerzos de Interpol. A pesar de los numerosos rastrillajes y las detenciones de personas vinculadas al entorno familiar y social del niño, el paradero de Loan sigue siendo desconocido.