Una denuncia por abuso sexual contra un sacerdote generó división entre los pobladores de la localidad catamarqueña de Belén. Los ciudadanos, indignados con la situación, toman sus posiciones: algunos se movilizan a la plaza principal para pedir Justicia y otros hacen lo mismo, pero para pedir por la paz y que no haya divisiones en la iglesia del pueblo.
El párroco de Nuestra Señora de Belén, acusado de haber abusado sexualmente a una niña de 16 años.
El párroco se llama Jesús de Dios Gutiérrez y que quedó detenido el 27 de octubre. Está acusado de abuso sexual y fue denunciado por la madre y la tía de una estudiante de 16 años que concurría habitualmente al grupo juvenil de la iglesia. La denuncia quedó caratulada como “abuso sexual gravemente ultrajante agravado por ser ministro de culto, en concurso con corrupción de menores agravada por ser encargado de su educación”.
Desde que se hizo pública la denuncia, la plaza Olmos y Aguilera se convirtió en el escenario de distintas marchas que realizan habitualmente los familiares y amigos del sacerdote. Además, los compañeros de la adolescente también utilizan este espacio para pedir justicia.
Ayer por la tarde, la plaza fue ocupada por aquellos que apoyan al sacerdote y, entre cantos y pancartas, dijeron: “Tenemos el arma más poderosa, la oración. Como pueblo católico están todos invitados a una caminata de oración, para cantar, rezar un rosario pidiendo por la paz de nuestro pueblo y no permitir que nos dividan como Iglesia y por los insultos a nuestro ministro. Cada persona que asista debe llevar un rosario”.
Por otro lado, los amigos de la adolescente salieron a protestar contra la Iglesia. Además, a esta marcha se sumó la madre de un adolescente que denunció al sacerdote Renato Rasguido en 2013 y la mamá de una niña de 14 años que acusó al intendente de La Puerta de Corral Quemado, Enrique Aybar.