Parecía que todas las noticias que estaba recibiendo Elián Valenzuela eran malas. Desde el pedido de excarcelación negado, hasta encontrar un celular robado en su casa que complicó aún más la causa, todo indicaba que su estadía tras las rejas iba a durar mucho tiempo más. Pero finalmente, en las últimas horas se dio a conocer la última decisión que tomó el juez Gabriel Castro: L-Gante se podrá marchar hacia la casa con prisión domiciliaria y una tobillera electrónica en la causa que lo tiene imputado por amenazas simples.
Si bien todavía resta saber en qué momento será trasladado hacia el domicilio, en el expediente quedó asentado que el mismo seguirá detenido en la casa de su representante Maxi “El Brother”, ubicada en un barrio privado de la localidad de Canning, en el partido de Ezeiza. “Hacer lugar a la morigeración de la coerción del encartado Elián Ángel Valenzuela, bajo la modalidad de prisión domiciliaria con monitoreo electrónico a llevarse a cabo en el domicilio del Sr. Maximiliano Barbaccia, la cual se hará efectiva cuando el presente resolutorio adquiera firmeza y cuando se reciba el informe positivo de la Dirección de Monitoreo Electrónico del Servicio Penitenciario Bonaerense”, comunicaron desde la Justicia.
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Después de 36 días detenido en la DDI de Quilmes, el papá de Jamaica podrá dejar la celda en donde escribió 80 canciones, las cuales espera por su libertad para poder volver al ruedo y éxito musical. Sus actividades en la misma eran pocas. Comía la comida que le llevaba la madre, que estuvo presente en la vereda del lugar absolutamente todos los días, escribía canciones en el único cuaderno con la única lapicera que contaba y a diferencia del resto de los detenidos, se encontraba en una celda sólo para él. Su vida se basaba en comer, dormir, escribir y hablar con abogados. Así fue como aumentó casi ocho kilos en pocos días de su estadía.
Los últimos días fueron confusos en lo que significaba su libertad o si seguiría preso. Pasaron solo dos semanas de que a Claudia Valenzuela le llegó un mensaje por parte del abogado, Juan Pablo Merlo, dando la noticia de que consiguieron la excarcelación del cantante. Pero luego del festejo que se generó en la puerta del servicio penitenciario, donde el cantante se encuentra detenido hace un poco más de un mes, llegaron las malas noticias negando que L-Gante pudiera salir en libertad.
Días más tarde, las cosas se complicaron más debido a que encontraron un celular robado en su casa y hoy, después de darse a conocer que anularon la excarcelación y que probablemente sería trasladado a un penal bonaerense, se dio marcha atrás ante aquellas decisiones y, por ahora, podría continuar su vida fuera de la cárcel pero con una tobillera electrónica.
¿Cómo se dio este revés? Merlo había solicitado la excarcelación ordinaria, pero el juez Gabriel Castro la rechazó. Después de la negativa, la fiscalía pidió la prisión preventiva y la misma fue confirmada por el magistrado hace 48 horas. Aun así, a la vez, la defensa de L-Gante solicitó la excarcelación extraordinaria, que se solicita por otro medio, y aquella sí fue aceptada por el juez, aunque la Cámara de Apelaciones la revocó, por lo cual, hasta hace tan solo horas, continuaría en prisión.
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A partir de ambos rechazos, tanto de la excarcelación ordinaria como la extraordinaria, llegaron al acuerdo desde la Cámara de Apelaciones de Mercedes que la ex pareja de Tamara Báez debía seguir tras las rejas, pero en las últimas horas se dio un giro total en la causa que modificó absolutamente todos los planes: el juez de Garantías de Moreno, Gabriel Castro, resolvió la prisión domiciliaria.