Cuando se disponía a subirse a un micro desde Santa Clara del Mar a Buenos Aires, personal de la DDI y de la Estación de Policía Comunal local detuvo a Juan Cruz Galarregui de 56 años, principal sospechoso del femicidio de Rocío Fernández de 27, quien estaba desaparecida desde el viernes 2 de agosto. Encontraron el cuerpo de la víctima el lunes 1° dentro de un freezer en la casa del detenido en Mar del Plata, quien huyó ni bien las fuerzas entraron al lugar. El último mensaje que mandó a un amigo la noche de su desaparición la podría haber salvado: "Cualquier cosa voy a estar en este lugar".
Según la investigación que encabeza el fiscal titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Nº4 Fernando Berlingieri, la razón por la que Fernández se habría acercado a la casa del barrio 9 de Julio durante la madrugada del sábado fueron sus problemas de consumo. Galarregui vendía estupefacientes y este habría sido el anzuelo para que la joven terminara en el lugar, no sin antes advertirle dónde estaba a su amigo.
Lamentablemente, quien recibió el mensaje tardó en decírselo a la madre de la víctima y recién en la mañana del lunes el allanamiento llegó al lugar de donde se fugó el presunto femicida. Los resultados de las autopsias que surgieron en las últimas horas determinaron que la causa de muerte fue un golpe en la cabeza que produjo "un traumatismo encéfalo craneano y una fractura en el hueso hioides de su cuello". Esto sucedió entre 48 y 72 horas después de su desaparición, por lo que si se hubiera actuado con más celeridad, el asesinato no habría ocurrido.
Cuando el personal de la Comisaría 5ta hizo el allanamiento en el domicilio ubicado en Grecia entre Libertad y Balcarce, lo realizó en la casa lindera de donde finalmente estaba. Aunque fueron vecinos quienes avisaron a las fuerzas de seguridad que la casa lindera a esa era una usina de problemas constantes. Así fue que ingresaron al lugar donde hallaron el cuerpo sin vida de Fernández en un freezer.
"Tiene un abogado particular que lo estaba esperando en Tribunales", aseguraron en C5N respecto a Galarregui, una persona que tiene muchos antecedentes y que en marzo había recibido un disparo en una pierna tras fugarse de un robo con 1.200 dólares. Si bien tiene el derecho de negarse a declarar, los cálculos de acuerdo a las demoras estimaron que sí estaría prestando testimonio ante la Justicia.
Dramática detención de Galarregui
Se sabe que durante el momento de su detención, Galarregui llevaba un DNI de otra persona que tenía características físicas similares a él. Si bien la trampa casi le funciona al presunto femicida, las preguntas que le hicieron los investigadores respecto a su domicilio lo pusieron en jaque y lo dejaron en evidencia respecto a su relación con el crimen.
El último viernes Rocío Fernández se había ido a la casa de un amigo de ella desde su casa en Punta Mogotes. Cerca de la 1:30 se fue de allí rumbo a su fatal destino, sin saber le esperaba la muerte en las manos de Juan Cruz Galarregui. "Se pidió el taxi y no supimos nada más de ella", habían asegurado sus familiares que tienen que lamentar esta pérdida irreparable.