Darío Gastón Badaracco vio a Araceli Fulles por última vez en la madrugada del 2 de abril. Según él, esa noche tuvo sexo con la joven de 22 años. Badaracco tiene 29, trabaja en un corralón, está casado y es padre de, al menos, dos hijos. Anoche lo capturaron: es el principal acusado por el femicidio de Araceli.
La última imagen de Araceli, junto al sospechoso.
La última imagen que compartió Araceli en su Facebook tiene fecha del 1 de abril. Fue publicada a las 14:37. La muestra junto al "Nerii", como ella lo llamaba. Es Dario Badaracco, quien negó una y otra vez, saber algo sobre Araceli, cuando se la buscaba con la esperanza de encontrarla con vida.
Dario Badaracco es padre y está casado.
Según se muestra en las redes sociales, tiene un ritmo de vida con excesos: drogas, alcohol, salidas con mujeres y un declarado "amor" por sus hijas.
Preservativos, alcohol y el billete enrollado para consumir cocaína.
Su vida no parece haber sido afectada pese a la desaparición de Araceli Fulles, a quien conocía y mantenía un vínculo amoroso ocasional. Pero tampoco pareció afectarlo, en caso de que se confirme, ser el autor del crimen y tener enterrado el cuerpo de la víctima en su casa.
Badaracco junto a su mujer y dos de sus hijas.
En las últimas publicaciones mostró los platos con comida en una cena con su mujer. También se pueden encontrar imágenes de sus salidas con amigos, donde expone su gusto por el champagne, la cocaína y asistir a fiestas. En una de las fotos se lo ve tomando alcohol y disparando con un arma de juguete.
En una fiesta con amigos.
Las salidas de Badaracco.
Pese a que Badaracco declaró tres veces y se realizaron allanamientos en esa casa, recién ayer la Justicia envió a los perros rastreadores para revisar nuevamente la propiedad, ubicada en Alfonsina Storni 4477, en José León Suárez. Araceli vivía a 15 cuadras, el la misma casa donde la familia pasó 26 días rogando tener noticias sobre ella.
Dario es casado y tiene 29 años.
Su última declaración fue ayer por la mañana y, según trascendió, se contradijo en parte de sus dichos. La fiscal Graciela López Pereyra dudó sobre él en algunos titubeos que lo dejaron expuesto pero no pidió su detención. Luego de declarar se retiró en libertad. Más tarde se ordenó un segundo allanamiento que reveló una escena de horror.
Dario al volante de su moto.
Anoche, al cabo de una intensa búsqueda, fue hallado cerca de la villa 1-11-14.