Fueron los y las vecinas de la localidad de Esquina, Corrientes quienes alertaron al 911. “Al arribar la Policía nadie respondió y al ingresar se encontraron con la mujer sin vida en la habitación”, comentó el comisario Luis Romero, del Departamento de Relaciones Institucionales de la Policía de Corrientes. El cuerpo sin vida resultó ser de Nilda Aranda, de 41 años y presentaba signos de estrangulación.
El principal sospechoso del femicidio era José Ojeda, pareja de Aranda, quien fue intensamente buscado hasta que fue hallado colgando de un árbol, ya sin vida. El sospechoso fue el principal apuntado en la causa luego de que se viralizara el audio que le envió a un familiar donde confesaba el supuesto crimen. “Yo mal, yo mal. Cometí una desgracia, boludo. La maté a Nilda, la maté a Nilda, y dentro de un rato voy a matar a otro acá, y me voy a matar yo, cuídense, cuídense, ayúdenle a mami”, decía el hombre en el mensaje que le envió por WhatsApp a su entorno y que pocas horas después fue filtrado a los medios de comunicación.
Quien está a cargo de la investigación es el fiscal Gustavo Mosquera. Los datos que arrojó el informe forense fueron impactantes: “Un golpe en la cabeza y algunos cortes superficiales, pero que la causa de muerte habría sido por asfixia, ya que tenía fuertemente anudado un pañuelo al cuello”, este último dato revelaría la causa de muerte de la mujer.
Sin embargo, no se encontraron signos de defensa. Aranda tenía siete hijos y habría mantenido una relación sentimental con Ojeda desde hace meses. Hasta el momento de su muerte, allegados contaron que la relación podía ser catalogada como “violenta” pero ella nunca lo denunció ante la Comisaría de la Mujer.