La policía bonaerense detuvo a cinco personas de nacionalidad paraguaya, a quienes acusan de integrar fueron detenidas acusadas de integrar la "Banda Guaraní del Piki Voley". En un operativo antidrogas encubierto en tres asentamientos del partido de Quilmes -entre ellos la Villa Azul, aislada por un brote de covid-19- se secuestraron 3.500 dosis de cocaína y 200 de marihuana.La banda se llamaba así porque aprovechaba los torneos de Piki voley, deporte nacional en Paraguay, para vencer su mercancía. Los narcos operaban en las villas Azul, La Matera y Papa Francisco. La policía realizó sus operativos con un camión lleno de efectivos en la caja, tapados con una lona, drones y cámaras térmicas.Entre los detenidos hay cuatro hombres y una mujer. Por el momento, sólo trascendieron los alias que usan en el mundo del hampa: "NN Máximo", proveedor y jefe de la organización; "Chipá", el encargado del fraccionamiento; "Paisa", el encargado del ocultamiento y traslado; y "Turrín" y una mujer apodada "Kerupi", encargados de la venta.
Los vendedores cruzaban del barrio Papa Frencisco al asentamiento La Matera a través de puentes peatonales situados en los cruces del arroyo Las Piedras. Cuando vio llegar a la policía, Turrín se tiró al agua, pero lo atraparon. La policía hizo un total de siete allanamientos, en los cuales participaron alrededor de 100 agentes de distintas áreas y de distintos departamentos. Fue necesaria además la participación de un equipo de la Policía Ecológica de Avellaneda, que se encargó de desinfectar a los policías que participaron de los allanamientos.En los procedimientos fueron secuestradas 3.500 dosis de cocaína, 200 de marihuana, dinero en efectivo, una balanza de precisión, elementos de fraccionamiento para armar los "baguyos", una pistola calibre 9 milímetros con numeración suprimida, diez teléfonos celulares y cuadernos con anotaciones.