03 Enero de 2017 20:45
Tras la trágica rave en la que murieron Giuliana Maldovan (20) y Lucas Liveratore (34), fueron secuestradas más de 27 mil pastillas de éxtasis, valuadas en unos 10 millones de pesos, que se encontraban ocultas en el equipaje de un ciudadano dominicano que arribó al aeropuerto internacional de Córdoba proveniente de España, según informó la AFIP.
Fueron secuestradas más de 27 mil pastillas de éxtasis.
Según precisó la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) en su página web, a través del personal de Aduana se detectó con un escáner no intrusivo unas 27.750 pastillas rosas de dicha droga, por un peso total de 9,65 kilogramos.
De acuerdo al informe oficial, el ciudadano dominicano, con pasaporte holandés, había partido en un vuelo de Air Europa desde Madrid, España, y realizado una escala en Asunción del Paraguay previa a su arribo a la provincia de Córdoba.
Los inspectores de la AFIP-Aduana informaron que las drogas estaban envueltas en paquetes de papel carbónico y bolsas plásticas negras ocultas en las dos valijas de este pasajero, las cuales contaban con un doble fondo especialmente preparados para el contrabando.
Las valijas contaban con un doble fondo para el contrabando.
Esto se da pocos días después de la fatídica fiesta que se llevó a cabo en el boliche Punta Stage de Arroyo Seco, la cual contó con la presencia de DJ británico Sasha. El evento sucedió el sábado por la noche y contó con la presencia de unas 5.000 personas.
Tras el festejo, producto de las drogas que venden en este tipo de fiestas, fallecieron Maldovan por un cuadro de “hemorragia digestiva alta y probable intoxicación aguda por consumo de estupefaciente” y Liveratore de un paro cardiorrespiratorio causada por una deshidratación.
La fiesta fue el sábado por la noche, en el boliche Punta Stage, de Arroyo Seco.
A raíz del hallazgo de las pastillas en el aeropuerto internacional de Córdoba, el ciudadano quedó detenido e incomunicado a disposición del juez Federal 3 de Córdoba Miguel Vaca Narvaja.
Un caso similar había ocurrido a principios de noviembre, también en el aeropuerto internacional cordobés, adonde una joven de 24 años, oriunda de la provincia de Buenos Aires, arribó en un vuelo de Latam proveniente de la capital española con 22.100 pastillas de éxtasis ocultas.
