Una joven de Río Segundo, Córdoba, denunció que dos hombres la abordaron cuando iba en bicicleta con su hijo, la obligaron a ir con su hijo en brazos hasta una arboleda, a pocos metros del Puente Naranja y allí la golpearon e intentaron abusarla.“Me aparecieron dos tipos en moto, me amenazaban con que no mirara ni hiciera nada que llamara la atención porque iban a matar a mi hijo”, contó Nadia Müller mediante un video.
Nadia tiene rasguños en su cara y aún quedan rastros de las marcas de las torturas que padeció, entre ellas las de un cable que le enroscaron en el cuello para ahorcarla.
“Me dio muchísimo miedo, no tuve otra alternativa que hacerles caso”, agregó y remarcó que fue amenazada con un arma punzante.
Durante el ataque, uno de los sujetos dejó la bicicleta en un árbol y se quedó junto al niño, que estaba atado con el cinturón de la sillita. “Uno tenía a mi hijo, mientras el otro intentaba sacarme la remera, me rompió uno de los breteles, como no podía porque yo estaba luchando, me tiró al piso y me pedía todo el tiempo que no le mirara la cara. Se sentó arriba de mí, me bloqueó las piernas y sacó una especie de cable y me empezó a ahorcar”, repasó.
"Se sentó arriba de mí, me bloqueó las piernas y sacó una especie de cable y me empezó a ahorcar"
Las marcas del cable con el que la ahorcaron.
Nadia también presenta arañazos en la cara.
Mientras Nadia luchaba por su vida pensaba en que la vida de su hijo estaba en riesgo. “Sólo podía mirar a mi hijo que lloraba. Con el arma intentaron romperme el pantalón, pero no pudo terminar de sacármelo, no pudo cumplir con su objetivo de violarme”, indicó. Ante la posibilidad de ser descubiertos los agresores desistieron pero antes de irse arrojaron al niño al río.
"Me dijeron 'Ya que no podemos hacerte nada, mirá lo que le hacemos a tu hijo' y lo tiraron al río"
“Me dijeron 'Ya que no podemos hacerte nada, mirá lo que le hacemos a tu hijo' y lo tiraron al río”, contó entre lágrimas Nadia, que de inmediato se metió al agua y pudo sacarlo sano y salvo. “Mi hijo me abrazó muy fuerte y me dijo: 'Mamá, te amo'. Hoy me tocó a mí y a mi hijo pero tenemos que cuidarnos para que estas cosas no nos sigan pasando”, concluyó la joven consternada.