31 Mayo de 2016 09:51
Con el paso de las horas, cada vez son más las pruebas que se suman en su contra. En un audio se puede escuchar a Jonathan Luna hablando sobre “una planchita en buen estado” y “un celular” para vender. Ambos objetos eran pertenencias de Micaela Ortega y las mismas fueron encontradas en el domicilio del acusado.
Luna engaño por Facebook a Micaela.
Para vender los objetos utilizó la misma estrategia que utilizaba para hablar con menores: creando historias y mintiendo descaradamente.
“Me dijo que te pregunte si conocés a alguien que quiera comprar una planchita o que la cambia por un celu. Está nueva la planchita", dice Jonathan Luna en un audio que se conoció las últimas horas.
La imagen de Luna detenido.
Sin éxito, no vendió las pertenencias de “Mika”, tal como la llamaba la familia. Y en la casa de Luna se encontró el celular y la planchita. Además, en otra parte de la casa se halló la campera y objetos menores.
“Me dijo que te pregunte si conocés a alguien que quiera comprar una planchita o que la cambia por un celu. Está nueva la planchita
A pesar de que el acusado se negó a declarar ante la Justicia, confesó ante los policías que lo detuvieron que la mató “porque no quiso tener relaciones sexuales”.
Por el momento, es el único acusado del crimen de Micaela Ortega, pero el fiscal Rodolfo De Lucía sostuvo que investigan si contó con la participación de alguna otra persona.
Asimismo, el fiscal destacó entre las pruebas reunidas para imputar a Luna los datos surgidos de la red social Facebook, en la que el acusado tenía “cinco perfiles” con identidades falsas y a través de uno de ellos contactó a Micaela y “le hizo creer que hablaba con una chica”.
LUGAR DEL CRIMEN
Micaela fue encontrada sin vida en un descampado cercano a la ruta nacional 3, a la altura de la localidad de General Daniel Cerri, lindante a Bahía Blanca y a Ingeniero White, donde residía Luna. En la autopsia se determinó que la menor recibió golpes de puño en la cabeza y murió asfixiada por estrangulamiento mecánico con una remera, el mismo día en que desapareció.
Los médicos forenses levantaron del cadáver una serie de muestras que serán sometidas a peritajes complementarios para determinar si la niña sufrió un abuso sexual.
La prueba clave que acorrala a Luna, el asesino de Micaela