El teléfono de Cristina Castro sonó el sábado por la noche. Era de la fiscal Santiago Ulpiano Martínez. Con frialdad protocolar, le informó que un pescador había advertido la presencia de un cadáver semienterrado, junto al lecho del Canal Cola Ballena, ubicado entre las localidades de General Daniel Cerri y Villarino. La mujer llamó de inmediato a sus dos abogados y partió junto a su mejor amiga -quien la acompañó durante estos casi cuatro meses de búsqueda- al lugar. Era de noche, el terreno era hostil y no pudo siquiera acercarse al cuerpo. Sólo pudo ver una foto del esqueleto encontrado, que fue tomada por el propio fiscal.
Su primera preocupación fue que no sucediera lo mismo que pasó con las imágenes del cuerpo de Santiago Maldonado en la morgue de Esquel, divulgación ilegal por la que fue condenado en el 2019 el médico legista Werther Aguiar. "Lo único que espero es que esta foto no aparezca en ningún canal de televisión, ni en ningún diario", le espetó con molestia Cristina al fiscal. Esa noche, Cristina estuvo acompañada por su padre, sus hijos y su mejor amiga. No pudo dormir.
A primera hora del domingo, sus abogados la pasaron a buscar una vez más. Leandro Aparicio y Luciano Peretto la acompañaron en todo momento. Al llegar, el Equipo Argentino de Antropología Forense enviado por la ministra de Seguridad de Nación, Sabina Frederic, ya trabajaba en el lugar. La postal fue desgarradora. El esqueleto fue encontrado boca abajo y desnudo. Pero eso no fue todo. El accionar de la marea lo desmembró y todavía no se encontraron sus dos brazos.
"A simple vista no vimos golpes en el cuerpo. Pero hay que tener en cuenta que hay una dispersión ósea por el accionar de la marea. Es un terreno hostil y pantanoso. Se recolectaron restos del cuerpo en quince lugares distintos. No nos pudieron confirmar cuánto tiempo lleva ahí, eso se evaluará en la autopsia. Lo que sí quedó claro es que el estado del cuerpo no se condice con el de la zapatilla", precisó Peretto, en alusión al calzado que la propia madre encontró a 30 metros del lugar. Era la misma zapatilla que usó Facundo el 30 de abril, día en el que desapareció después de que lo frenaran en un retén policial por violar la cuarentena.La fortaleza de Cristina llamó la atención de todos los que participaron de las pericias. "Estaba delante del cuerpo que podría ser de su hijo, en un estado indescriptible. Pero no se movió ni un momento", reconocieron a BigBang quienes estuvieron presentes en el lugar. Fueron cinco horas en las que la mujer se apoyó en su mejor amiga, mientras sus abogados seguían con precisión cada una de las pericias. Mientras los peritos tomaban muestras del cuerpo, la mamá de Facundo recorrió la zona y encontró el calzado de su hijo.
"Imaginate la indignación de una madre que no podía entender cómo nadie la había visto", advierten desde su entorno. "La encontré yo, porque ni siquiera la habían visto y está intacta. Además, cuando llegamos al lugar notamos que hay huellas de un vehículo que llegan justo hasta el lugar en donde están los huesos. Ninguna de las personas que están acá (realizando las pericias) bajó por ese lugar. Tampoco el señor Pérez bajó por ahí, que fue el pescador que lo encontró. Estoy convencida de que plantaron el cuerpo", reconoció en la improvisada conferencia de prensa que realizó junto a sus abogados antes de abandonar el lugar.
Aunque todavía deberá aguardar al menos dos días para la identificación del cuerpo, Cristina les aseguró a sus íntimos: "Es Facu, me lo dice mi intuición de madre. Sé que es mi hijo". "Está en shock. La está acompañando su mejor amiga y nosotros como abogados le damos toda la contención posible", reconoció en diálogo con BigBang Aparicio, el abogado que solicitó de inmediato que se peritaran las huellas de un vehículo encontradas junto al cadáver.
"Esto nos va a permitir no sólo conocer el ancho del vehículo que pudo haber descendido hasta ahí, sino la marca de los neumáticos. No es una huella reciente y descartamos que sea de la Policía Federal, porque no han descendido por ese lugar. Por supuesto, para nosotros no es un dato menor, porque puede tener que ver con cómo llegó el cuerpo a este lugar", explicó el abogado. Consultado sobre la demora en la realización de la autopsia, que se estima se realizará el martes en la Ciudad de Buenos Aires, Aparicio explicó: "Pedimos tener un perito de parte, para poder tener nuestra propia información. Eso lleva tiempo. El cuerpo ya está siendo trasladado. No queremos hacer las cosas rápido, queremos hacer las cosas bien y con la atención que el caso requiere".
El cuerpo fue trasladado a una morgue y llegará a la Ciudad recién el lunes. La autopsia estará a cargo del equipo de Antropología forense de la Nación. "Permitirá confirmar la identidad del cuerpo y la causa de muerte. Además, se tomaron muestras de los restos óseos encontrados, que serán analizados también en la sede de Antropología Forense en la Ciudad de Córdoba", precisó Peretto.
A mi hijo lo desaparecieron por romper la cuarentena y el intendente se dio el gusto y el placer de comer un asado la semana pasada con la Policía Bonaerense"
Tanto Cristina, como sus abogados, se mostraron críticos del accionar de la Fiscalía y denunciaron un plan de encubrimiento del que, según denuncian, participan el intendente de Villarino, Carlos Bevilaqua; el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni; y la Policía Bonaerense. "Quiero la renuncia inmediata del señor Berni y del intendente, que es una basura de persona. Acá vinieron a tirar los restos de mi hijo y esto sigue siendo Villarino. A mi hijo lo desaparecieron por romper la cuarentena y el intendente se dio el gusto y el placer de comer un asado la semana pasada con la Policía Bonaerense. Es una vergüenza todo. Tengo mucha bronca con muchas personas".
"Desconfío hasta de mi sombra", reconoció Cristina, en diálogo con este portal. La mujer y sus abogados no sólo denunciaron a la bonaerense por amenazar testigos y sembrar pistas falsas. “Me amenazaron a mí también. Mientras se hacía el allanamiento en la comisaría de Origone me mataron al perro de Facu, que estaba en casa. Me mataron al perro, mientras encontrábamos su amuleto. A esta altura, desconfío de todo el mundo”.
No descanso ni un segundo. No duermo. Este lugar (por la estación de servicio) es mi refugio. Mis compañeros son mi contención en esta búsqueda”
Durante los casi cuatro meses de búsqueda, Cristina no dejó de trabajar. Sigue levantándose todos los días a las cuatro de la mañana. Se pone el uniforme y parte rumbo a estación de servicio de Bahía Blanca. Son más de cien kilómetros de su Pedro Luro natal, los mismos que se disponía a realizar Facundo el 30 de abril. “No descanso ni un segundo. No duermo. Este lugar (por la estación de servicio) es mi refugio. Mis compañeros son mi contención en esta búsqueda”.
Si se confirma que el cuerpo encontrado es el de Facundo, Cristina enfrentará una nueva batalla en la Justicia. "Son muchos más los responsables. Pero los que entienden son ellos (sus abogados) y voy a dejar que actúe la Justicia. Lucho desde mi lugar y como puedo. Necesito que la gente entienda que esto no es algo que me guste, ni que quiero hacer política o ser famosa. Soy una mamá que está pidiendo que le digan qué le hicieron a su hijo”.