"Narcisista, con rasgos psicopáticos y paranoides, sin exteriorización de vivencias de angustia ni arrepentimiento". Ese fue parte del diagnóstico que el peritaje psiquiátrico previo al juicio arrojó sobre el femicida Fernando Farré, quien hoy dio sus últimas palabras en el juicio oral que se le sigue por el asesinato de su ex esposa Claudia Schaefer.
Farré intentó conmover al jurado con una carta dedicada a sus hijos.
Y su comportamiento ante el proceso, que comenzó el lunes de la semana anterior, no hace más que remarcar esa impresión. De la calma casi soberbia, mascando chicle como si estuviera en plena reunión empresaria, pasó a las lágrimas al leer una carta dedicada a sus hijos.
"Clau ya no está entre nosotros", sollozó refiriéndose a Schaefer, a quien mató de 74 puñaladas. "Daría mi vida, la cambiaría en un segundo, por irme yo y que ustedes estén con su madre".
Rasgos psicopáticos
"No tiene muchas posibilidades de salir bien parado", analiza en charla con BigBang, Miguel Maldonado, perito psiquiátrico que supo evaluar a otro femicida, Ricardo Barreda. "Los argumentos de emoción violenta que esgrime la defensa son casi inviables".
Para el psiquiatra Miguel Maldonado, Farré presenta "rasgos psicopáticos acentuados".
Para el especialista, el comportamiento de Farré durante el juicio no hace más que subrayar sus rasgos psicopáticos acentuados. "Habla de hijos y de sentimientos, y al mismo tiempo está tranquilo como si estuviera presenciando un partido de fútbol por televisión. No es congruente su actitud con su discurso", señala.
Maldonado agrega como características esenciales del psicópata, "la ausencia de culpa, el ego por momentos desmesurado y la insensibilidad ante el sufrimiento ajeno", advirtiendo al mismo tiempo que eso no significa "que lo puedan hacer pasar por enfermo, es una estructura de personalidad".
Arma de doble filo
Así, en este marco, Farré explota la la sensibilidad del jurado porque "cuando el psicópata desea obtener ventajas, lo que hace es mostrarse seductor y agradable, aunque sólo lo hace con fines utilitarios".
Farré asesinó a Claudia Schaefer de 74 puñaladas.
En ese punto, el especialista destaca que una sugestiva frase del alegato final del femicida ("de esta vida me llevo el amor de mis hijos"), que podría apuntar a intenciones suicidas, "juega con la idea de la autoeliminación como una forma de presionar".
De todas formas, para Maldonado, la estrategia no deja de ser un arma de doble filo. "En general, los jurados repudian estas actitudes", asegura el experto.