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De Pérez Corradi a los Lanatta: ¿cuánto les cobran sus abogados?

De Pierri a Burlando, cuánto cuesta defender a un preso condenado a perpetua o involucrado en una causa mediática.

por Rodolfo Palacios

18 Noviembre de 2016 09:10
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Cárcel de Ezeiza, octubre de 2015. El abogado miró fijo al preso, acusado por narcotráfico, y no dio vueltas:

-Tu situación es complicada, pero encontré una estrategia que puede dar resultados.

-Hacé lo que sea para que quede libre.

-No te lo puedo garantizar. 

-¿Y cuánto querés?

-Un palo verde.

Antes de que el detenido pudiera pronunciar palabra, el letrado remató: 

La mitad, cuanto antes. La otra, cuando termine mi trabajo.

Al final, el acusado pagó y logró una reducción de su condena, pero no quedó del todo conforme con su abogado. ¿Cuál es el precio de la libertad? 

"Cuando uno cae preso, es capaz de dar lo que no tiene. Yo me fundí, pero lamentablemente siempre quedé en cana", dice Luis Alberto Valor, alias el Gordo Valor, en diálogo con BigBang.

El enigma de la efedrina

Ibar Pérez Corradi, el presunto ideólogo del triple crimen de General Rodríguez, cuyas víctimas fueron Sebastián Forza, Leopoldo Bina y Damián Ferrón, gastó mucho dinero en su defensa. Ya sea por esa causa o por un pedido de extradición de los Estados Unidos. "Le salió más de un millón de dólares y los puso sin chistar", dijo una fuente. 

Corradi habría pagado un millón de dólares por su defensa.

¿Cuánto pagaron los hermanos Martín y Cristian Lanatta? Los condenador por el triple crimen y protagonistas de la triple fuga con Víctor Schillaci tuvieron varios abogados. Están detenidos en Ezeiza y cargan con una cadena perpetua en su contra. "No les cobramos nada, tomamos la causa porque es mediática y le servía al estudio", dijo uno de los ex abogados de los "tres fugados".

"A los Lanatta no les cobramos nada

Martín Lanatta decidió cambiar de abogados. ¿Cuánto le cobraron?

"No tengo un peso. Ni yo ni mis hermanos. Nos defienden porque nos creen", dice Martín Lanatta.

Lo que resulta un misterio es cuánto pagó Leonardo Fariña por su defensa. Según uno de sus ex abogados, "no pagó nada, hasta se le prestó plata".

Burlando, de no cobrar nada a pedir "una fortuna"

No es leyenda. Ocurrió y hubo testigos de esta escena. Hace unos dos años, Fernando Burlando almorzaba en un restorán de Puerto Madero con un colaborador. De pronto, un mozo se le acercó para decirle que tenía un problema con la obra social de su hija enferma. “Yo te lo resuelvo”, le prometió el famoso abogado penalista. “Pero no tengo un mango", le dijo el hombre. Burlando le guiñó el ojo y le sonrió. Al otro día le solucionó el asunto y no le cobró nada.

Esta anécdota sirve para graficar algo: los “abogados gourmet” no tienen una tarifa fija. Ante iguales situaciones, pueden pedir un millón de pesos o, en muy pocos casos, trabajar gratis. Varía según la causa judicial, el contexto y la exposición mediática. El famoso abogado llegó a bailar en la pista de Showmacth, que cuenta con dos estudios de 20 colegas que trabajan para él, pasó de defender a asesinos (como los del caso Cabezas) a asistir a familiares de víctimas, como ocurrió con el caso Candela, la nena asesinada en agosto de 2011. Dice que por ese caso tampoco cobró.

Burlando se jacta de ganar un 90% de los casos en los que interviene.

Las tarifas

Una causa grave por narcotráfico puede costarle al acusado desde US$ 300.000. Los abogados también cobran las visitas que hacen a sus defendidos a la cárcel. “Todo depende del delito y la urgencia que se tenga. Una vez tuve que poner $ 400.000 por una causa de robo a un banco. La causa la agarró otro abogado que me terminó pidiendo la misma cantidad”, dijo un ladrón que pasó diez años preso. 

¿Cuánto puede llegar a cobrar un abogado como Burlando

Según cuenta una fuente a BigBang, a Carlos Tévez, por ejemplo, una vez le pidió 500.000 euros para defender a su hermano, involucrado en un robo ocurrido en Córdoba. Y con el fallecido empresario Ricardo Fort tuvo un enfrentamiento judicial en el que le reclamó una cifra cercana a los US$ 8 millones. 

“No sé si soy el más caro, pero seguro soy el mejor”, le dijo Burlando a BigBang.

Amigos y colegas. Están en el top ten de “abogados premium”.

Miguel Ángel Pierri jura que en algunos casos no cobró un centavo. “Nunca diré cuánto cobré por el caso Mangeri, pero lo que sí dije una vez es que la defensa del portero me la pagó un empresario que me conocía. Los costos de una defensa varían según el caso, no es lo mismo una causa grande por narcotráfico que un accidente o un crimen”, le asegura  Pierri a BigBang

La defensa del portero femicida la paga un empresario para el que trabajó hace unos años.

En general, el abogado cobra la mitad por adelantado y la otra parte cuando termina la defensa. Aunque su defendido sea culpable, debe declararse inocente siempre. No es una regla escrita: no está en ningún código procesal ni manual de Derecho. Son dos palabras simples que ciertos abogados penalistas con calle y contactos poderosos suelen decir a sus defendidos cuando están en problemas. “Negá todo”.

Los polirrubros

Aunque está prohibido por el código de ética del Colegio de Abogados, algunos defensores les cobran a sus clientes con casas y autos. "Está el caso de un conocido penalista que terminó poniéndose una inmobiliaria y una concesionaria de autos usados con lo que se quedaba de sus defendidos", cuenta un abogado que pidió reserva de identidad.

"Un abogado terminó poniéndose una inmobiliaria con lo que se quedaba de sus defendidos

"Pierri no es barato, muchos lo llaman por su experiencia y por su exposición mediática. Y en los juicios es muy sólido. Se dice que por menos de 50 mil dólares ni te recibe", cuenta una fuente a BigBang.

Saul Goodman, el inefable abogado de Breaking Bad que tiene su propia serie.

Víctor Stinfale es otro de los abogados penalistas top, aunque ya casi no ejerce. En la década de 1990 lo llamaban “el abogado del diablo”. Entre sus defendidos históricos aparecen Monzer al-Kassar, acusado de ser traficantes de armas; José Barrita, alias “El abuelo”, ex jefe de la barra de Boca; Carlos Telleldín, el reducidor de autos procesado por la explosión de la AMIA. En su caserón de Ramos Mejía tenía cuadros con fotos de Al Capone y Marlon Brando en el papel de El Padrino.

 “Por un palo verde no defiendo al violador, directamente me acuesto con él”, llegó a decir un día.

Stinfale con su defendido estrella yendo a ver al Papa Francisco.

“Por un palo verde no defiendo al violador, directamente me acuesto con él

El sucesor de Stinfale es Matías Morla, que en la actualidad es el abogado de Diego Maradona. Incluso fue invitado especial en el último cumpleaños de El Diez.

Morla en el cumpleaños de Maradona en Abu Dhabi.

”Cuando se trata de gente vinculada al poder político o económico, los estudios más importantes no mueven un pelo por menos de un millón de pesos. Una causa de homicidio anda por ahí, depende si el acusado es indefendible”, dice una fuente judicial. 

Carlos Telleldín reconoce que no cobra barato.

El abogado Carlos Telleldín dice que los abogados son como la ropa: “Si es más cara, dura más”. “En mi caso, a los que no me pudieron pagar les tomé como parte de pago sus autos y sus casas”, admite Telleldin, que estuvo preso por el atentado a la AMIA. Colecciona autos de lujo y se jacta de vivir en un caserón con pileta.

Telleldín suele defender ladrones pesados y narcos. 

“A un detenido sin recursos -dice Telleldín- no le cobro mucho. Una vez defendí a un narco colombiano que me pagó muy bien, son capaces de pagar un palo verde, uno arriba del otro, pero no voy a decir cuánto me dio a mí. El tema es no fallarles, no hacerles el verso”, dice enigmático. Pero aclara: “A la plata la hice laburando: atiendo mi celular siempre y los presos saben que pueden contar conmigo. Soy leal y dejó todo”.

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