por Natalia Torres
06 Julio de 2017 05:00
El músico, periodista y productor musical Marcelo Montolivo se convirtió en los últimos meses en eje de una captura internacional solicitada por Interpol.
La ficha de Montolivo en la web de Interpol.
Es que, días antes de ser condenado a ocho años de prisión en febrero por "abuso sexual agravado por ser gravemente ultrajante y por aprovechar la convivencia preexistente con la víctima en calidad de autor", se fugó y actualmente se desconoce su paradero.
La denunciante fue Verónica Nápoli, quien llevó a Montolivo frente a la Justicia por agredir sexualmente a su hijastra, Micaela, cuando era menor de edad. Ambas mujeres sospechan que el abusador fue notificado por alguna fuente judicial interna sobre su inminente condena y por eso escapó a Uruguay.
Un infierno sin punto final
"Él fue pareja de mi mamá, mi padrastro", le contó la joven a BigBang, detallando que los hechos denunciados sucedieron entre sus 8 y sus 15 años. "Me violó, pero cuando empezamos con el juicio no se pudo comprobar con las pericias. Sí el abuso", agrega.
El infierno al que Montolivo empujó a Micaela la llevó a refugiarse en el consumo de drogas. Y fue cuando decidió ingresar a un tratamiento de rehabilitación que su camino de curación completa comenzó.
Montolivo abusó de su hijastra desde que ella tenía 8 años.
"El director terapéutico de la clínica y mis terapeutas -que declararon en el juicio también- me ayudaron a sacar afuera lo del abuso. Así, me animé a contárselo a mis papás", relata la joven, quien hoy tiene 23 años y es madre de dos hijos junto a su pareja.
Y es justamente a la luz de este difícil sinceramiento que la bronca de Micaela ante la fuga de Montolivo es una consecuencia lógica. "No lo podía creer", se lamenta. "Yo creo que le tendrían que haber dado prisión preventiva. Creo que no lo están buscando, ni siquiera le allanaron la casa en estos meses".
Pasado punk
Montolivo supo ser, en los años '80, uno de los baluartes de la escena punk porteña gracias a su banda, Los Baraja, donde compartía formación con Marcelo Pocavida.
Los Baraja en la tapa de su primer EP.
Luego de continuar su carrera musical en Celeste y La Generación -grupo encabezado por Celeste Carballo-, Los Visitantes y Medusa se dedicó a la industria discográfica.
Así, fundó los sellos Discos Voladores y Ultrapop, y trabajó en BMG. Paralelamente, abrió la disquería Fénix y se desempeñó como periodista musical en radio, gráfica y televisión.
Montolivo también fue periodista en varios medios gráficos, radiales y televisivos.
"Yo me desilusioné mucho del punk porque pensaba que iban a ser personas que pensarían diferente", supo declararle Montolivo al diario Página 12. "Y al final fue lo de siempre: estaban todos borrachos, tirados, pensaban que el punk era romper todo, emborracharse, pelearse, no bañarse. Y para mí era otra cosa, quizás una muy utópica y hasta tonta vista desde hoy, que era la idea de cambiar el mundo".
