En círculos musicales, Ignacio Pardo era conocido por su apodo de "Naco Goldfinger". Y, con ese mote, consiguió la fama como saxofonista de Los Fabulosos Cadillacs desde 1984 hasta 1991.
Ignacio Pardo fue saxofonista de los Fabulosos Cadillacs entre 1984 y 1991.
Pero su ansia no estaba en el arte sino en el delito. Y, así, Pardo comenzó a labrarse una vida paralela como delincuente años después de abandonar la banda liderada por Vicentico.
Así, por un violento robo cometido en el 2015, "Naco" recibió hoy una condena a ocho años de cárcel por decisión del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 6 de San Isidro, a cargo de la jueza Débora Ramírez.
Robo y violencia
La cronología del hecho comenzó en la sucursal de San Isidro de la parrila La Dorita y tuvo como víctima a la contadora Elisenda Espínola. La mujer había pasado a buscar la recaudación de los últimos tres días y pidio un remis para retirarse del lugar.
"Naco" en una foto de las primeras épocas de los Fabulosos Cadillacs.
Sin embargo, Espínola terminó subiéndose a un Ford Focus conducido por un falso remisero perteneciente a la banda criminal, José Figueroa. El auto fue abordado luego por otro de los cómplices del robo, Cristian Salinas, quién golpeó y amenazó con una picana eléctrica a la víctima.
En el Focus, la contadora fue trasladada a San Fernando donde fue despojada de los 82.178 pesos de la recaudación y de varios efectos personales.
De acuerdo a la acusación del fiscal, "Naco" Pardo actuaba como jefe de la banda y supervisó el robo junto a otro de los imputados, Leandro Ibarra, desde otro automóvil que acompañaba al Focus. En la causa, también fue acusado como entregador el parrillero de La Dorita, Javier Olmedo.
Con antecedentes
Pardo fue detenido el 7 de octubre del 2015 por efectivos de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de San Isidro. En ese momento, "Naco" intentó escapar por los techos de su casa, ubicada en Luis María Campos al 500, en el barrio de La Horqueta.
Sin embargo, éste no es el primer encontronazo del ex saxofonista con la ley. En febrero del 2014 ya había sido detenido acusado de ser el entregador en dos robos ocurridos en el country San Isidro Labrador de Benavídez, donde vivía en aquel entonces.
Por esa causa, se le había brindado una pena de tres años de prisión en suspenso.