13 Septiembre de 2018 13:49
Luego de cuatro jornadas consecutivas, este jueves en la ciudad de Campana un tribunal compuesto por 12 jurados populares consideró que el carnicero Daniel "Billy" Oyarzún, de 39 años, es inocente.
Por decisión unánime, el tribunal explicó que el acusado ejerció una legítima defensa al atropellar con su auto a Brian González, el ladrón que le robó en su carnicería de Zárate el pasado 13 de septiembre de 2016.
El carnicero Daniel Oyarzún fue declaro inocente por la Justicia.
En cuanto se dio a conocer la postura del tribunal oral, afuera del edificio se empezaron a escuchar aplausos y gritos de aliento. Eran los familiares del carnicero, quienes se habían enterado del veredicto y estaban felices.
Minutos después, Oyarzún salió en libertad y, en medio de un mar de cámaras, dijo que siempre supo "que era inocente". "Quiero seguir estando con mi hija y seguir laburando como siempre. Quiero tener trabajo para seguir con mi carnicería", dijo emocionado.
Entre lágrimas, comentó que se sentía triste por haber pasado una situación tan traumática, pero que la realidad es que siempre supo que "era inocente".
Oyarzún dijo que siempre supo que era inocente.
"Yo nunca fui un justiciero, siempre fui un laburador. Voy a laburar para recuperar lo que he perdido", comentó por último mientras agradecía a todos por el apoyo.
Esta mañana, antes de que se supiera la condena, el acusado pidió decir sus últimas palabras, y conmovido hasta las lágrimas, le solicitó a los jurados que lo "dejen disfrutar" de su hija y de su trabajo.
En instantes se conocerá el veredicto del juicio contra el carnicero Daniel Oyarzún.
"Confío en la justicia. No soy un asesino como todos me marcan. Lo que sucedió no lo busqué", sostuvo mientras miraba a los ojos a las 12 personas que iban a decidir su futuro esta tarde.
"Les pido que me dejen disfrutar de mi hija y trabajar. Es lo único que quiero", dijo mientras se secaba las lágrimas.
El hecho ocurrió el 13 de septiembre de 2016.
En sus alegatos, la fiscalía había solicitado que fuera condenado por exceso en la legítima defensa, la querella pidió el homicidio simple, y la defensa del acusado solicitó su absolución.
Ricardo Izquierdo, el abogado de Oyarzún, sostuvo que existía un plan criminal dentro de la cárcel para asesinar al carnicero si quedaba preso, por lo que argumentó ante el tribunal que el otro ladrón que sobrevivió al robo en la carnicería era quien estaba la frente de esta macabra idea.
La familia de la víctima dijo que Brian González no era un ladrón.
Por su parte, el padre de González, Horacio, dijo que su hijo era un chico excelente. "El se había casado, tenía su familia, se estaba haciendo su casa. Como se había quedado sin trabajo me lo traje conmigo", contó.
"Yo te digo que Brian era muy dócil, no puedo entender qué estaba haciendo ahí. Era muy miedoso. Un pibe muy bueno", cerró.