El juicio por el femicidio de Anahí Benítez, la joven de 16 años que fue asfixiada, abusada y asesinada en agosto de 2017 en Llavallol, Lomas de Zamora, comenzó este martes con la declaración de los familiares de la víctima, y con la presencia en la sala de los dos acusados: Marcos Bazán y Marcelo Villalba.

Además del testimonio clave de la madre de la adolescente y el de una vecina de uno de los sospechosos, en esta primera audiencia el abogado defensor de Villalba hizo un planteo en el que aseguró que el principal sospechoso no está en condiciones de afrontar un proceso judicial debido a que sufre de un problema psiquiátrico.

De esta manera, el Tribunal Oral en lo Criminal N°7, compuesto por los jueces Roberto Conti, Elisa López Moyano y Roberto Lugones, resolvió que el próximo jueves los peritos de la causa se presenten a declarar para determinar si el debate en su contra puede o no continuar.

En los lineamientos acusatorios que las partes presentaron esta mañana, tanto la fiscalía, a cargo de Fabiola Juanatey, como la querella, indicaron que los dos acusados debían ser condenados por los delitos de privación ilegitima de la libertad, abuso sexual y homicidio agravado en el marco de violencia de genero.

Lee más. Cautiverio, abuso y femicidio: las pruebas del juicio por el crimen de Anahí Benítez

"Respecto a Bazán y Villalba, en la acusación principal con la fiscalía estamos de acuerdo, pero por una cuestión de razonamiento del Ministerio Público, hicieron una acusación subsidiaria con respecto a Bazán por encubrimiento agravado, algo que nosotros no consideramos así, ya que creemos que Bazán fue partícipe necesario de lo que le pasó a Anahí", explicó a BigBang el abogado de la mamá de Benítez, Guillermo Bernard Krizan.

Por el momento, Villalba es el más complicado de los dos. Su ADN se encontró en el cuerpo de Benítez, más precisamente una muestra de su semen en las partes íntimas de la víctima, por lo que es el principal sospechoso de haber abusado sexualmente.

Sin embargo, la situación de Bazán también es difícil: hay varias pruebas que lo incriminan y la más fuerte tiene que ver con el perro rastreador que indicó que la adolescente entró con vida a la casa donde él vivía, muy cerca de la reserva de Llavallol a la que la menor solía ir con amigos.

Luego de los alegatos de apertura, la primera persona en declarar fue Silvia Pérez Vilor, la mamá de la adolescente, quien dio detalles de cómo era la relación que tenían ellas y cómo eran los movimientos habituales de la menor. Además, la madre de Anahí Benítez enumeró las cosas raras que notó el día de la desaparición de su hija, y hasta mencionó a personas que podrían conocer lo que pasó, como es el caso de los amigos y el novio de la víctima.

Del mismo modo, el primo de la joven dio datos preciosos de situaciones que sucedieron en los días en que se buscaba el paradero de Benítez, y en su declaración remarcó que los amigos dijeron algunas cosas que a él llamaron la atención. "Por ejemplo, contó que las amigas de ella al momento de buscarla hicieron un inventario de lo que pudo haber pasado, mientras que escuchó decir a otro amigo que 'de esta iban a zafar' ", comentó el letrado.

Después del testimonio del padre y de la abuela de Benítez, también habló una vecina de Marcos Bazán, quien aportó un dato clave para el juicio al decir que la noche anterior a la aparición del cuerpo de Anahí dentro de la reserva Santa Catalina, ella vio que en la casa del acusado hicieron una fogata muy grande, y que después de eso los perros de la zona empezaron a ladrar hacia el lado donde luego apareció el cadáver de la joven, enterrado y semidesnudo.

Tanto el abogado como la familia de la víctima sostienen que hay más personas involucradas en el hecho, y tienen como principal esperanza que durante este proceso algunos nombres puedan develarse para poder finalmente juzgar a todos los que participaron del brutal hecho.

"Los chicos (amigos de Anahí) saben algo más. Calculo que debe tener miedo de algunas de las personas involucradas, que quizás pudieron haberlos amenazado. El viernes están citados para declarar, y esperamos que ahora que son mayores de edad se animen a contar más cosas", sostuvo Bernard Krizan.

Aunque el testimonio de los jóvenes estaba previsto para el próximo jueves, lo cierto es que el abogado oficial de Villalba hizo un planteo en base a un informe psiquiátrico que dice que el acusado no estaría en condiciones de someterse al proceso, a pesar de que hay otras pericias que indican que sí puede afrontarlo.

De este modo, el tribunal decidió pasar a un cuarto intermedio, y convocó a los profesionales (dos aportados por la defensa, otro por la Corte y dos más oficiales) que participaron de los estudios psicológicos y psiquiátricos para que declaren y determinen si Villalba puede o no continuar el debate judicial en su contra.

"Hay dos o tres pericias que dicen lo contrario a lo que planteó el abogado. Por eso se convocó a todos los peritos intervienes para que declaren para dar su posición. En caso de que no lleguen a un acuerdo, habrá que hacer una junta, y si se determina que es así, habrá que suspender el proceso para Villalba pero no para Bazán", se lamentó Bernard Krizan.

En esta primera audiencia, el principal acusado respondió a las pocas preguntas que le hicieron para identificarse ante los jueces, y hasta asumió que sufría de una especie de delirio místico, la enfermedad que su abogado sostiene que no le permite enfrentarse al juicio. Por esto mismo, tanto Villalba como Bazán se negaron a declarar, aunque esto no quita que puedan llegar a hacerlo más adelante.