Un momento de mucha angustia se vivió el fin de semana, cuando un joven de 18 años que estaba en pleno viaje de egresados junto a sus compañeros en Bariloche fue arrojado desde el segundo piso del hotel donde se hospedaba, luego de una discusión que mantuvo con estudiantes de la escuela María Luisa Clarac de la localidad de Gregorio de Laferrere que se estaban alojando en el mismo lugar.
Por el hecho, fueron imputados cinco alumnos mientras que el Ministerio Público Fiscal de Río Negro investiga las causas de la caída que sufrió el joven desde el segundo piso del hotel Pioneros del complejo Villa Huinid de Bariloche, el último sábado. "La denuncia fue radicada por la madre y por la propia víctima, que no perdió el conocimiento en ningún momento", aclararon desde el ministerio.
La calificación que recae sobre los cinco acusados de empujar por la ventana del hotel al estudiante de la Santa Catalina de Moreno es la de "lesiones graves", aunque puede agravarse a medida que avance la investigación preliminar. La causa quedó en manos de la fiscal Betiana Cendón que, según se informó, detuvo la marcha del colectivo que trasladaba a uno de los grupos de egresados, entre quienes se encontraba la víctima.
La fiscal explicó que se presentó junto al Gabinete de Criminalística "para realizar un análisis más exhaustivo de las cámaras de seguridad" y que pidió al médico policial que volviera a revisar al joven, que habría sido blanco de ataques y había sido habilitado por los médicos que lo atendieron a continuar el viaje hacia su ciudad de origen. Por otro lado el micro con el grupo de quienes serían los agresores, logró la autorización para retirarse de la ciudad.
Cendón dijo que evalúa pasar la carátula a "tentativa de homicidio" dado el contexto en el que se produjeron los hechos. El episodio ocurrió este sábado en el hotel Pioneros, perteneciente al complejo Villa Huinid. La víctima recibió asistencia de parte del equipo médico del establecimiento y luego fue trasladado en una ambulancia hasta un centro asistencial privado, donde detectaron que sufrió fracturas múltiples en un brazo y traumatismos en todo el cuerpo.
Si bien la primera versión que trascendió fue que el joven se había arrojado por decisión propia desde el segundo piso del hotel, las cámaras de seguridad del establecimiento permitieron establecer que hubo cinco estudiantes del colegio religioso que participaron del hecho. La fiscal también confirmó que fueron los cinco jóvenes los que provocaron la caída y reveló que "uno de ellos es menor de edad". Por ahora, ninguno quedó detenido.
El proceso deberá continuar con la notificación de los pasos que siga la causa en los domicilios que fueron declarados por los involucrados, en Buenos Aires, ya que todos regresaron a sus respectivos hogares tras el incidente, Según los primeros testimonios, los dos contingentes estudiantiles una violenta discusión a lo largo de varios días que derivó en el ataque que recibió el joven de 18 años, quien fue arrojado al vacío desde un segundo piso.
La madre del joven que resultó herido acompañaba al grupo y fue quien radicó la denuncia penal, por la que hay cinco egresados imputados en la causa. En su presentación aseguró que ambos grupos de alumnos tuvieron conflictos durante su estadía, situación que fue notificada al coordinador general de la empresa. Sin embargo y a pesar de la advertencia, las discusiones continuaron hasta que el sábado se produjo el ataque.