28 Enero de 2018 09:40
El escuadrón 56 de Gendarmería comenzó el miércoles el peritaje del teléfono de Fernando Pastorizzo, el joven asesinado por Nahir Galarza en Gualeguaychú. Después de cinco días de arduo trabajo en el Edificio Centinela, los especialistas lograron ingresar al teléfono, pese al sensor biométrico con huellas digitales del aparato.
Nahir tras la ampliación de su declaración.
El trabajo se complicó porque días antes del homicidio, Nahir, quien en un primer momento negó incluso haber sido pareja de la víctima, había descubierto la clave de su celular. Según se pudo constatar en los mensajes recibidos por la única imputada por el crimen, Fernando le había reclamado que le había revisado el celular, enviado fotos e incluso borrado contactos.
LOS MENSAJES DE FERNANDO A SUS AMIGOS: "NAHIR EMPEZÓ A DAR LA CABEZA CONTRA LA PARED Y AHÍ CASI ME DESMAYO"
“¿Cómo hiciste para descubrir el pin de mi teléfono?”, indagó indignado el joven de 20 años. “Te conozco muy bien como para no saberlo”, respondió la confesa asesina, quien mantuvo una relación “con idas y vueltas” de casi cinco años con su víctima.
Fernando había decidido terminar la relación y su ex lo asesinó de dos disparos.
Desde entonces y determinado en su postura de culminar con la relación, Fernando cambió la clave desencriptada por Nahir y añadió una segunda medida de seguridad: la dactilar. Además, sumó una tercera contraseña para poder ingresar a su WhatsApp. De esta forma, quería asegurarse que su por entonces novia no tuviera no sólo acceso a sus contactos, sino también a sus redes sociales; algo que solía revistarle.
FRÍA Y DISTANTE: ASÍ SE MOSTRÓ NAHIR DURANTE LA PRIMERA AUDIENCIA
Según detallaron los amigos de la víctima, el pin (encriptado por un patrón manual) era “muy complejo, casi como un garabato”. Fueron ellos quienes, luego de que Nahir confesara el crimen, revelaron, además, que una vez les había llegado una foto de su amigo durmiendo desde el WhatsApp del joven y que Fernando les explicó que había sido su por entonces novia quien le había abierto el teléfono y enviado la imagen íntima.
La oscura “nube” de Nahir: mensajes, likes ocultos y el teléfono de Fernando
En tanto, se sigue trabajando en el material que logró sustraerse del iPhone 8 de la confesa asesina. En principio, se constató que Nahir le envió mensajes a Fernando minutos después de haberle pegado los dos disparos a modo de coartada. En los mismos, instalaba la versión que sostuvo en la ampliación de su declaración: que el joven asesinado ejercía violencia de género.
Fernando les contó a sus amigos que Nahir lo había golpeado. Los forenses constataron los moretones.
Ese no fue el único comportamiento 2.0 que complica a Nahir. Días después de confesar el crimen y ya en la Comisaría de la Mujer, alguien de su entorno accedió a su cuenta de Instagram, por entonces en modo “privado”, y la abrió. ¿El objetivo? Comenzar con el “operativo blanqueo de imagen” de la joven.
ASÍ ABANDONABA NAHIR LA ESCENA DEL CRIMEN
Durante las pocas horas que estuvo pública, se borraron dos fotos de la cuenta. Además,
en los últimos veinte días el
de
Nahir
sumó un seguidor (algo que tiene que ser aceptado porque su perfil es privado) y se borró un mensaje marcado como favorito. La fiscal
Martina Cedrés, quien reemplaza a
Sergio Rondoni Caffa durante sus vacaciones, quiere saber cuál era el contenido borrado, quién lo eliminó de la nube y por qué quisieron ocultarlo.
