por Alejo Paredes
20 Julio de 2020 17:28Hoy se cumple exactamente una semana de la desaparición de Salvador Altamura: el abogado de 48 años, robusto y de 1.95 metros de altura, fue visto por última vez el pasado lunes 13 de julio, cuando salió de su departamento ubicado en 25 de Mayo al 200, en la zona céntrica de la localidad bonaerense de Quilmes.
El hombre salió de su casa a bordo de su moto, una Honda Crf 250 L, y se dirigió a la casa de un amigo para hacer juntos una caminata. Las cámaras de seguridad del edificio en el que vive captaron que regresó a las 18:06, pero según se ve en las imágenes siguió de largo y aceleró.
Para su familia, alguien lo estaba siguiendo y la principal sospecha es que pudo haber sido víctima de algún delito, como un "secuestro".
La última imagen que se tiene de él es la captada por la cámara de seguridad de su edificio. Minutos más tarde, precisamente a las 19 horas, su teléfono, un iPhone 7, dejó de funcionar y no pudo ser rastreado.
Desde el entorno del abogado le señalaron a BigBang que temen "que lo hayan secuestrado", aunque aclararon que no recibieron llamados extorsivos hasta el momento.
Al mismo tiempo, la moto Honda de Salvador fue vista en manos de motochorros durante un robo que llevaron a cabo entre las calles Saavedra e Yrigoyen, en Quilmes Este.
“Salvador no andaba en nada raro. Hasta ahora parece un hecho de inseguridad. Tenemos miedo de que le hayan hecho algo para robarle su moto", le señalaron a este portal.
La familia de Salvador denunció que durante la madrugada del martes 14 de julio, pasadas las 3 de la mañana, alguien llegó a bordo de su moto con el casco puesto e ingresó al edificio.
Sin embargo, afirman de que no se trataba del abogado por su contextura física: "No era Salvador. Él mide casi dos metros y es delgado. El que manejaba su moto era una persona más robusta", afirman.
En ese sentido, señalaron que el sospechoso de haber ingresado al domicilio del abogado estuvo una hora y media en el lugar, y luego se retiró llevándose consigo “una importante cantidad de dinero” que Salvador guardaba en su casa en modo de ahorro.
"Creemos que lo torturaron para averiguar dónde vivía y dónde tenía la plata", comentó un familiar.
El casco y la moto Honda de color rojo de Salvador aparecieron el martes en Villa Itatí, una villa de emergencia situada en Don Bosco, Quilmes, pero volvieron a desaparecer antes de que la policía pudiera acceder al asentamiento para secuestrarla. "Capaz la usaron para un nuevo robo. Hasta ahora volvió a aparecer", señala la familia.
La causa quedó en manos de la UFI N° 1 a cargo de Ariel Rivas. Por ahora está caratulada como "averiguación de paradero" y hasta el momento los trabajos de investigación no arrojaron resultados. Se allanaron al menos dos domicilios donde, según testigos, podría haber estado Salvador, pero ninguno dio resultados positivos.
Por ahora se busca reconstruir los minutos posteriores a la desaparición de Salvador con el registro de las cámaras de seguridad del municipio y de edificios privados de la zona, aunque -aclararon los familiares- muchas estarían fuera de funcionamiento.