Camila Aldana Tarocco tiene 26 años y fue vista por última vez el sábado 4 de abril, cuando se dirigía en colectivo al centro de Moreno a las 7 de la mañana.
Desde entonces, su familia está desesperada y pese a la cuarentena total y obligatoria que rige en todo el país desde el 20 de marzo en todo el país, la buscan sin descanso.
La joven, según sus familiares, llevaba puesto un pantalón negro y camperón, marrón clarito, del estilo Parka y unas zapatillas de color rosas a la hora de irse de su casa.
La joven se dirigió en colectivo al centro de Moreno, en las calles Del Cañon e Irigoyen. Su madre, Claudia Sánchez, salió a pegar carteles por su barrio y reclamó por su aparición en las redes sociales.
Las últimas personas que tuvieron contacto con Camila fueron una amiga, que además es su vecina, su ex pareja y su novio actual. “Con él estuvo hasta las 10, después volvió a su casa. Supuestamente el ex marido la llevó a la parada para tomar el colectivo y de ahí no se sabe más nada. El teléfono le andaba mal”, contó su mamá, visiblemente desesperada.
Sobre su ex pareja recae una acusación por violencia de género, por lo que ya fue llamado a declarar y si bien afirmó que estuvo con Camila, aclaró que ella “se retiró sola" y por sus propios medios. Hasta el momento, la DDI de Moreno-General Rodríguez intenta determinar dónde está y por ahora la causa está caratulada como “averiguación de paradero”.
Por ende, todavía no hay sospechas de que la joven de 26 años haya sido víctima de un femicidio. Camila tiene tez blanca, ojos verdes, el pelo cortado con flequillo, mide 1,61 metros y un tatuaje en el cuello.
"Se está haciendo todo lo que hay que hacer. Ahora van a pedir las cámaras pero nadie sabe dónde está", sumó su mamá, quien aguarda por la aparición de su hija.