El filicidio es el delito que comete un padre o una madre cuando provoca deliberadamente la muerte de su hijo. Es complejo de comprender este tipo de casos y en los últimos tiempos preocupa el crecimiento de asesinatos de niños donde sus padres están directamente involucrados o sospechados de ser los responsables.
En muchos de estos casos, los padres mataron a sus hijos por venganza. Sin embargo, aunque esta práctica parental es un delito que crece, a partir de la entrada en vigencia del nuevo Código Civil, los padres no podrán pegarles a sus hijos, ni siquiera el típico “chirlo” en la cola.
Hoy se conoció un caso estremecedor. Una niña de 5 años murió en el Hospital de San Fernando luego de ser trasladada supuestamente por haberse caído de la escalera. La madre y el padrastro de la menor fueron interrogados. Están sospechados de estar vinculados a la muerte de la menor.
El parte médico asegura que falleció en consecuencia de lesiones graves y tiene distintas marcas y quemaduras en su cuerpo que dataría de un deceso no natural ni accidental. Ambos padres insistieron que se cayó de la escalera pero los peritos encontraron marcas de quemaduras en sus brazos y traumatismos severos en sus brazos.
Como ese caso en los últimos tiempos se conocieron otros igualmente escalofriantes.
En abril, una mujer policía fue detenida sospechada de haber matado a su hija de 12 años de un disparo en la cabeza con su arma reglamentaria, en una vivienda de Caballito. El trágico hecho tuvo lugar en una casa ubicada en la calle Juan Bautista Alberdi al 1400 y todo habría comenzado a raíz de una discusión entre ambas por una serie de televisión.
Filicidio, una problemática en aumento.
Pero también existen antecedentes de asesinatos de padres a hijos de mayor edad. Como es el caso de un hombre de 57 años que mató de una puñalada a su hijo de 33, durante una discusión mantenida en aparente estado de ebriedad en una casa de la localidad cordobesa de General Cabrera. El hecho ocurrió a medidos de marzo en una casa de la calle Bartolomé Mitre al 600, del barrio Argentino, en General Cabrera, a 220 kilómetros al sur de la ciudad de Córdoba.
Según determinó la policía el hombre tomó una cuchilla de carnicero de unos 35 centímetros de largo y le aplicó a su hijo un puntazo en la zona lumbar izquierda, que le provocó la muerte de forma casi instantánea. El agresor quedó detenido e imputado de "homicidio calificado por el vínculo".
Los filicidios se pueden combianar con los femicidios
Filicidio y Femicilio
En el Interior se conocen con mayor frecuencia aún estos casos e incluso se combinan con otros tipos de violencia, como el femicidio.
El ejemplo es lo ocurrido en Santiago del Estero cuando un hombre de 56 años -identificado como René Sequeira- ató a una silla a su esposa, le disparó en la cabeza, la roció con combustible y la prendió fuego. Lo mismo hizo con los 2 pequeños hijos -de 3 y 5 años-. A raíz del suceso Viviana Himelfard falleció mientras que sus niños permanecen internados en grave estado.
El asesino con sus dos hijos, en tiempos felices.
Uno de los casos más recientes es el que ocurrió en Entre Ríos, donde un hombre se peleó con su ex mujer y luego chocó el auto en el que viajaba con sus hijos mellizos. Uno de los menores murió, mientras que el otro se encuentra internado en grave estado.
Juan Romero, padre de los niños, le envió un mensaje a su ex pareja, madre de los menores, que decía "No vas a ver más a tus hijos".
“No vas a ver más a tus hijos
La pareja estaba separada y Romero era el encargado de buscar a los chicos, de 7 años, a la salida de la escuela y llevárselos a su madre, según consignó el diario Río Uruguay.
En Entre Ríos, un padre chocó apropósito para matar a sus hijos.
El choque ocurrió en la ruta 14 en el kilómetro 242, cerca del ingreso asfaltado a la localidad de Puerto Yeruá, en Entre Ríos, cuando Romero, de 41 años, circulaba en contramano e impactó de frente contra un camión. Los niños salieron despedidos del auto. Ambos fueron trasladados a un hospital cercano, donde Agustín, uno de los menores, falleció.
Caso emblemático
Romina Tejerina heló la sangre de toda la sociedad con su caso; dio a luz a su bebé y lo mató. La joven, de 19 años en ese entonces, manifestó que el bebé fue producto de una violación sexual que sufrió el 1 de agosto de 2002 a la salida de un boliche, que habría tenido miedo de revelar bajo amenaza de muerte por parte del violador. No había revelado su embarazo a nadie, excepto a su hermana Érica, a quien pidió no contar nada bajo amenaza de suicidarse; Romina disimulaba su embarazo usando una faja y tomando laxantes.
Romina Tejerina mató a su bebé recién nacido.
Después del embarazo de siete meses, dio a luz en el baño de su casa y, con la ayuda de su hermana, cortó el cordón umbilical y colocó a la bebé en una caja pequeña; luego , producto de un ataque psicótico, ya que según afirma “vio la cara del violador en su rostro”, atacó a su hija con un cuchillo. La bebé fue trasladada al Hospital Guillermo Paterson de la localidad donde vivía. Después fue trasladada al Hospital Pablo Soria de San Salvador de Jujuy, donde falleció el 25 de febrero.