El asesinato de Leandro Alcaraz, el chofer de 26 años de la línea 620 que el domingo 15 de abril recibió dos disparos a la altura de Virrey del Pino, La Matanza, sigue siendo un misterio. Los investigadores se encuentran estancados en un bache repleto de dudas y contradicciones que hasta el momento tiene dos detenidos: Jonathan Maximiliano Acevedo y Juan Alfonso Gauto.
Mientras tanto, el caso sigue ramificándose en otros puntos a tener en cuenta. Este martes, un joven de 18 años de nacionalidad paraguaya fue detenido a bordo de la línea 620 -la misma en la que perdió su vida Alcaraz- durante un control de pasajeros rutinario en La Matanza, acordados tras la muerte del chofer. El hombre detenido portaba una pistola calibre 22.
Detuvieron a un joven de 18 años armado en el colectivo de la línea 620.
Los vecinos sostienen que esta situación es moneda corriente de todos los días y apuntan a la intendenta de La Matanza, Verónica Magario, quien mantiene un duro enfrentamiento con el Gobierno de la provincia de Buenos Aires a cargo de María Eugenia Vidal por la seguridad en territorio bonaerense, a raíz de la muerte de Alcaraz.
El detenido tenía un revolver calibre 22.
En ese contexto, el presidente de la comisión de Seguridad en Diputados, Matías Ranzini, ingresó un pedido de informes en el que solicita al Tribunal de Cuentas bonaerense que detalle si la municipalidad de La Matanza posee plazos fijos o fideicomisos registrados en el sistema bancario argentino y/o extranjero.
Al parecer, las autoridades del gobierno bonaerense sospechan que los Fondos de Seguridad que la provincia giró al partido de Magario fueron invertidos en un plazo fijo. Desde el ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, a cargo de Cristian Ritondo, precisaron que en 2016, Magario ejecutó el 0% de los $239.109.900 del Fondo de Fortalecimiento en Seguridad, según detalló Perfil.
Los dos primeros detenidos por el crimen del colectivero.
Lo cierto es que el asesinato de Alcaraz destapó una olla que derivó en la búsqueda desesperada del responsable. Según pudo averiguar BigBang, aparecieron nuevos testigos que viajaban en el colectivo donde mataron a Alcaraz. Todos ellos deberán este miércoles presentarse, a partir de las 9 de la mañana, a una nueva rueda de reconocimiento.
Allí, ante el fiscal Emilio Spatafora, a cargo de la UFI de Menores se les volverá a exhibir -tanto a los nuevos como a los viejos testigos- a los únicos dos detenidos: Jonathan Acevedo, alias El Viejo, y Juan Alfonso Gauto, un hombre de 24 años de nacionalidad paraguaya. Ambos son muy diferentes desde el punto de vista físico, por lo que la Justicia espera un resultado positivo.
Crimen del colectivero: un tercer detenido y la pista del acusado que grita "Zapucay" y tira tiros al aire
Cabe recordar que por el crimen, durante la madrugada del martes 17 de abril fueron detenidos dos jóvenes de 17 y 18 años. Ambos identificados por los vecinos de la zona y los choferes de la línea 620 como los responsables del asesinado de Alcaraz. Al menor se lo conoce como “Rodolfito” y el mayor es Acevedo, quien fue señalado como el responsable de disparar el arma.
El menor recibió la libertad por parte del juez Rubén Ochipinti, a pesar de que un hombre -vecino de la zona, a quien los dos detenidos le habrían confesado el crimen y que fue catalogado como “el testigo clave”- había explicado que el joven de 17 años intentó subirse al colectivo de la línea 620 sin la tarjeta SUBE, razón por la cual mantuvo una fuerte discusión con el chofer Alcaraz.
“Hubo una persona que le ofreció su tarjeta para pagar el viaje, no la aceptó y llamó por teléfono a un amigo del barrio”, se puede leer en la declaración que tiene en su poder la justicia. Según el testigo clave, Rodolfito le dijo a Acevedo “prepárame el fierro, que cuando lleguemos al barrio con éste nos vamos a arreglar”.
Todavía se desconoce lo que ocurrió el domingo 15 de abril.
Lo cierto es que ambos, luego de declarar durante siete horas, negaron los hechos y apuntaron contra dos personas de nacionalidad paraguaya de aproximadamente 30 años, a quienes acusaron de vender droga en el barrio y de ser los responsables del asesinato del colectivero.
Esto provocó que el miércoles 18 de abril por la noche, la Gendarmería detuviera a Juan Alfonso Gauto, un hombre de nacionalidad paraguaya, de 24 años, 1.75 de altura, rubio, de rulos y ojos claros, tal y como detalló Acevedo durante su testimonio.
Al declarar como el tercer detenido de la causa, Gauto negó todo. En su descargo ante el fiscal Emilio Spatafora, el hombre dijo que el día del crimen había ido al jugar al fútbol a una cancha cercana a su casa. Era un torneo barrial y su nombre está registrado.
El chofer fue asesinado el domingo 15 de abril.
Sin embargo, las contradicciones entre los pasajeros y vecinos que vieron el trágico desenlace son muy importantes, por eso el fiscal Spatafora va a hacer una nueva rueda de reconocimiento para profundizar estos datos. A su vez, se están haciendo los informes secuestrados en los allanamientos, donde, valga la redundancia, hubo 11 teléfonos secuestrados.
Según pudo saber este portal, hasta ahora solo se pudo determinar los mensajes de texto de los once dispositivos, pero se está trabajando en la parte de audio y video. Esto se está llevando a cabo en el departamento judicial de Mercedes. Por su parte, Acevedo declarará el día viernes, a partir de las 12 del mediodía, frente al fiscal Spatafora y el juez Ochipinti.
Mientras tanto, el video que días atrás se filtró, donde Acevedo confiesa haber asesinado a Alcaraz, impulsado por otros detenidos que lo obligan a decir más frases y ruidos, sigue generando polémica. “´Soy Pantriste´, el que mató al colectivero. Le pido ¿cómo es? Perdón por haber matado por un boleto”, decía Acevedo, entre risas nerviosas e incomodas.
Por esa razón, su abogada señaló que realizarán una denuncia penal contra el personal policial de la comisaría de Ramos Mejía donde se encuentra detenido. Además, adelantó que pedirán una revisación médica, y reveló que sufrió un intento de acoso sexual.