21 Noviembre de 2016 13:04
El hallazgo del cadáver de Armando Bautista fue shockeante desde varios ángulos. Para empezar, fue encontrado sólo un día después que el del "arbolito" Nicolás Silva y a apenas tres cuadras de distancia.
El cuerpo del abogado fue hallado en su oficina, en el barrio de Monserrat.
Pero luego, los brutales detalles del crimen sumaron a la sensación. El hombre, un abogado de 61 años, estaba maniatado, tenía la mandíbula quebrada por un fuerte golpe y había muerto por asfixia.
El anillo incriminante
En la escena del crimen sólo quedó una pista: un anillo con la figura tallada de una calavera. Además, llamó la atención el detalle de que la puerta de acceso a la oficina donde se encontró el cuerpo no había sido violentada, por lo que la víctima muy probablemente le había franqueado el acceso al asesino.
Brian Romero, el presunto asesino, cayó el fin de semana.
El fin de semana, el homicida terminó cayendo de la mano del indicio que dejó cerca del cuerpo. Brian Romero López, taxi boy de 20 años, usaba en su fotografía de perfil de WhatsApp el mismo anillo que perdió durante el asesinato.
El joven cayó en un hotel de Longchamps donde se encontraba junto a su novia. Según amigos de Bautista, Romero López lo venía amenazando y extorsionando hace un tiempo.
Una filmación clave
Y una nueva revelación parece apoyar esta teoría: la filmación de las cámaras de seguridad que captaron la llegada del asesino a la oficina del abogado.
En el video, puede observarse a Bautista y Romero López discutiendo en la puerta del edificio, y al asesino haciendo un gesto con las manos con el que parece estar pidiendo dinero.
Luego, entran juntos al inmueble. Momentos después, el taxi boy abandona el lugar solo, llevando un bolso y una campera que no tenía en su poder cuando llegó.