Una de las grandes preguntas que depara el homicidio de Nicolás Silva es: ¿cómo pudieron el presunto asesino Pablo Reyes y su familia convivir 40 días con un cadáver en el departamento del cuarto piso de Venezuela 1218?
La pregunta no tiene una respuesta lógica: olor insoportable, líquido cadavérico, ruidos característicos de un cuerpo que se descompone, emisión de gases, no parece nada sencillo acostumbrarse a una escena semejante. Sobre todo si consideramos, además, que Silva vivía con su esposa y con cuatro hijos: dos de la pareja y dos de parejas anteriores de ambos, desde una chica de 16 años hasta un bebé de siete meses.
¿Cómo pudieron el presunto asesino Reyes y su familia convivir 40 días con un cadáver?
Si no es nada sencillo de tramitar el hecho simbólico de la convivencia con un muerto, el hecho físico de la putrefacción del cuerpo complica aún más las cosas. ¿Qué tipo particular de asesino estaría dispuesto a convivir él y hacer convivir 40 días a su familia con el cadáver de su víctima?
Pablo Reyes: "Tiene una cara que inspira terror", dice Maldonado.
Especialistas
BigBang consultó a dos especialistas: Enrique De Rosa y Miguel Maldonado, ambos de vasta experiencia en el mundo criminal. De entrada, Miguel Maldonado -perito psiquiatra en el caso Barreda, entre muchos otros- sorprende con su reivindicación del nunca bien ponderado italiano Cesare Lombroso. "Los albores de la criminología estuvieron signados por la figura de Lombroso, que acuñó la criminología positiva. Lombroso decía que había que fijarse en el "biotipo criminal". Ahora estudiamos la psiquis del individuo. Sin embargo, si usted mira las fotografías del sospechoso, Lombroso revive, porque Reyes tiene una cara que inspira terror. Yo lo veo a la noche y salgo corriendo: uno lo primero que piensa es en el delito", sostiene.
"Reyes tiene una cara que inspira terror
Maldonado destaca algunos rasgos psíquicos de Reyes que observa en su análisis del caso: "Es evidente que se trata de una persona que no tiene escrúpulos. Sólo así alguien sería capaz de tener un cuerpo tantos días en su casa. Supongamos -no lo sabemos que la mujer sea su encubridora- , pero seguramente no lo son los cuatro hijos que tienen. Una persona capaz de hacer convivir a sus hijos con un cadáver tiene abolidos los sentimientos altruistas, el cariño de padre, etc. A mí no me extraña que por unos pocos pesos haya sido capaz de asesinarlo: debe haber visto en este muchacho una presa fácil".
Miguel Maldonado subraya la "falta de vibración emocional" del asesino.
Para Maldonado, surge una evidente "falta de vibración emocional" en el hecho, y también hay evidentes "rasgos psicopáticos y antisociales". El perito está seguro de que el asesino tiene un vasto prontuario y antecedentes, "aunque no consten por escrito". Maldonado entiende que "sin dudas, este hombre ha cometido otros delitos" y asegura que, si por el fuera, "investigaría si hay una agresión sexual, robos o estafas anteriores".
Es un homicidio muy desorganizado, muy mal planificado
Enrique De Rosa, perito en los crímenes parricidas de Leandro Acosta y en el caso de Mariano Bonetto, el veterinario que apuñaló a dos chicas en La Boca, opina que la conservación de un cadáver durante un tiempo largo por parte del asesino "tiene que ver con una forma de psicosis. Es un homicidio muy desorganizado, muy mal planificado. El tipo de delito es muy llamativo, puede ser que haya elegido mal a la víctima, no lo sé... ¿Qué tipo de psicosis hay? No lo podemos saber. Un asesino que planifique su delito corta en pedazos a su víctima y la va tirando en containers. Este tipo lo guarda ahí en un placar en su casa y eso implica que: o quedó paralizado por su acto -y eso tendría que ver con una fuerte desestructuración de su personalidad- o le estaba dando algún fin relacionado con la necrofilia, o esperaba ser descubierto. El hecho es que si convivís con un cadáver estás viviendo una existencia paralela. El cadáver emite olores y demás. Dejá una semana un pedazo de carne en tu casa y vas a ver... Imaginate dejar un cuerpo entero 40 días. ¿Qué dijo la mujer?
Enrique De Rosa
- Que el cadáver estaba en el lavadero, que él había sacado el picaporte y cuando ella le preguntó por qué no se podía abrir, él le dijo que el picaporte se había volado con la tormenta...
- Eso más que una organización delictiva parece una organización psicótica. Son respuestas absurdas, paralelas a la realidad, y eso es lo que lo vuelve delirante. Todos sabemos que los picaportes no se vuelan con la tormenta. O ella es una cómplice o participa de la estructuración del sujeto. El acompañante del psicótico o es cómplice o es víctima y participa en la estructuración psicótica del otro. No se trata de una planificación estándar sino de alguna anomalía psíquica más profunda: algo más orgánico o más profundo en cuanto a la estructura psíquica. Ella acompañaba o convivía con eso. Pensá en un cadáver que se descompone: hay ruidos, emisión de gases... Eso es indisumulable, a menos que tengas una casa verdaderamente inmensa. Hay algo que está faltando. No es que te robaste un auto y lo escondiste en tu casa.
- Digamos que un cadáver es más difícil de esconder que un auto...
- Cuando estás guardando un cadáver no sabés que hacer, pero al cabo de unos días hacés algo: lo cortás en pedacitos, tratás de sacarlo del lugar donde está, lo quemás, algo... Leandro Acosta, por ejemplo, comenta que decidió quemar el cadáver de su padrastro porque no se soportaba más el olor. Ahí entra la cuestión psicótica de Reyes.