12 Marzo de 2025 09:16

La desesperación y la angustia se apoderan de Bahía Blanca mientras se cumplen cinco días de la desaparición de Pilar y Delfina Hecker, de 5 y 1 año respectivamente, quienes fueron arrastradas por la feroz corriente que desató el trágico temporal del pasado viernes. En medio del dolor, su madre, Marina Haag, realizó un conmovedor pedido en redes sociales: "Hoy Pili está cumpliendo 5 años, no pierdo la fe de que mis hijas están resguardadas con alguien que no se pudo comunicar todavía". Su mensaje resuena como un grito de esperanza en medio de la tragedia que enluta y desespera a la ciudad.
El caso conmociona a toda la comunidad. Las niñas y sus padres intentaban escapar del temporal cuando su auto, un Gol Trend, fue arrastrado por la fuerza del agua en la Ruta 3, a la altura de General Cerri. En medio del caos, Rubén Zalazar, un chofer de Andreani que circulaba por la zona, intentó auxiliarlos subiendo a las hermanitas a su camioneta. Sin embargo, segundos después, el vehículo también fue vencido por la corriente. Desde entonces, el paradero de Pilar y Delfina es un enigma aterrador.
El cuerpo de Zalazar fue encontrado el domingo en la misma zona donde las aguas desbordadas arrastraron a la familia Hecker. La confirmación de su fallecimiento oscureció las esperanzas de un desenlace favorable. No obstante, la búsqueda de las niñas no cesa y cada pista, cada rastro, es seguido con el máximo esfuerzo por las autoridades y rescatistas.
Los operativos, encabezados por la Policía de la Provincia de Buenos Aires y los bomberos, se extendieron a las lagunas que se formaron tras el temporal. Un perro rastreador marcó un punto de interés, pero el acceso sigue siendo imposible debido a la inundación persistente. Se espera que, con la baja de las aguas, los operativos puedan intensificarse.
El drama de esta familia estremece. Testigos aseguran haber visto al padre de las niñas, Andrés Hecker, correr desesperado entre el agua y la banquina, clamando por sus hijas. "Las nenas, las nenas", gritaba, en un intento desesperado de salvarlas. Su madre, Marina, tras lograr escapar del agua, recorrió centros de evacuación con la esperanza de encontrarlas a salvo, pero hasta ahora, no hay rastro de ellas.
Las autoridades manejan con cautela cada nueva información. El intendente local, Federico Susbielles, se mostró pesimista y dejó entrever la posibilidad de un desenlace trágico. "Hay un registro visual que nos hace presumir, lamentablemente, un mal desenlace", afirmó con pesar. La historia de Zalazar, el hombre que intentó salvar a Pilar y Delfina, agrega un tono de tragedia a esta dolorosa búsqueda. Oriundo de Viedma, el chofer de Andreani dejó una esposa y dos hijos pequeños. Su última publicación en redes sociales mostraba su felicidad junto a su hijo mayor en su primer día de clases, sin imaginar que días después su vida se apagaría en un acto de heroísmo.
Mientras el operativo de rescate sigue, el corazón de una madre late con la esperanza de volver a abrazar a sus hijas. "No pierdo la fe", insistió Marina en redes sociales. Y, mientras la ciudad entera contiene la respiración, todos aguardan con angustia por una señal de vida en medio del desastre.