El caso del doble crimen de La Plata tiene cabos sueltos por donde se lo mire. Todo es extraño y nada parece "cerrar": la camioneta chocada, las armas, los asesinatos a la vista de todo un barrio, el dinero que no fue robado y las escasas evidencias sobre el perfil del asesino del cirujano Guillermo Luna y su esposa, Laura Favre. Según el perito criminalista Miguel Maldonado, quedan esperar los resultados de las autopsias y las mediciones de balística, además de los informes de los peritos en la escena del crimen.
"Si le tenés bronca a alguien y querés vengarte, no lo matás de esta manera ni con esas armas. Se trató de algo más grande", afirma Maldonado. Por sus años de experiencia y conocimiento en crímenes y otros delitos, asegura que una de las claves en el caso son los calibres de las armas que se utilizaron para asesinar al matrimonio. "Un aficionado no usa ese tipo de arma", asegura.
Por ahora, hay más dudas que certezas sobre los autores del crimen.
Se refiere a que las víctimas fueron asesinadas con un revolver calibre 45 y con una pistola calibre 9mm. La primera de ellas es un tipo de arma que utilizaba la policía y que fue retirada de uso por sus especiales características.
"Es un arma que no cualquiera sabe manejar. Tiene seguro de empuñadura, que hay que apretarla muy bien para que dispare. Es pesada, y se la tiene que conocer bien. No es para aficionados. Es evidente que hay una mano profesional en este caso", sostiene.
El perito sostiene que es de uso frecuente por delincuentes, ex policías o tiradores deportivos. Con este dato, se podría poner la mira sobre la posibilidad de que el crimen tenga vinculación con algún ex miembro de la fuerza, debido a que el cirujano enfrentó en la Justicia cargos por estafar a la obra social IOMA para operar a policías. Luna informaba intervenciones falsas para luego realizar implantes mamarios o de glúteos. Pero algunas pacientes sufrieron secuelas y lo denunciaron por mala praxis.
Tiempos felices. Llevaban 20 años juntos y eran padres de una joven de 16.
"Los conflictos que él tuvo están relacionados directamente con personas de la fuerza. Además, según declararon testigos presenciales del momento del descarte de la camioneta con los dos cuerpos en su interior, se vio que eran un hombre y una mujer. Lo que confirma que no se trataría de un sicario", sostiene Maldonado.
Sobre esto último, se refiere a que en los casos en los que se encarga un crimen a un sicario, generalmente no son mujeres. "Es raro ver un sicario mujer y mucho menos una pareja de sicarios", añade.
Maldonado no deja de mencionar algo importante sobre la 9mm, el arma que sería del cirujano y que fue utilizada en la escena del crimen.
"La 9mm es una arma de uso frecuente, son usadas por particulares. No es extraña su presencia, pero si la combinación. Usar un arma .45 y una 9mm para matar a dos personas no es habitual. El asesino o los asesinos conocen mucho sobre armas y su manejo", finalizó.