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El emotivo relato de los policías acribillados por los Lanatta y Schillaci en Ranchos

Lucrecia Yudati y Fernando Pengsawath relataron su experiencia en radio El Mundo. “Fue horrible, con mi compañero no nos vamos a olvidar", remarcó la oficial.

18 Febrero de 2016 15:13
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A casi dos meses del tiroteo que los enfrentó con los prófugos Cristian y Martín Lanatta, y Víctor Schillaci, los policías Lucrecia Yudati y Fernando Pengsawath hablaron públicamente por primera vez en radio El Mundo. El 31 de diciembre, ambos cumplían funciones en un control policial a la altura del kilómetro 100 de la ruta provincial 20, a tan sólo tres kilómetros de la localidad de Ranchos. Allí, intentaron detener la camioneta en la que se desplazaban los tres evadidos, quienes descendieron del vehículo y procedieron a atacarlos a disparos.  

Yudati (a la izquierda de la foto) perdió parte del talón y el tobillo izquierdos.

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“Recibí varios tiros en las piernas”, contó Yudati. “Tres veces a la semana estoy yendo al quirófano para limpieza y me falta la reconstrucción del pie izquierdo porque no tengo ni talón ni tobillo. Me van a hacer un injerto y una reconstrucción, pero los médicos me dicen que va todo muy bien, evoluciona favorablemente”, agregó.

“Les habíamos hecho señas para que bajaran la velocidad”, relató la oficial recordando los hechos de la noche en la cual se enfrentó a los Lanatta y Schillaci. “Yo estaba de espaldas cuando frenan. Me doy vuelta y veo dos disparándonos. Desde ahí ya no me acuerdo mucho más. No había sentido los disparos, cuando caigo en la zanja boca arriba veo como me quedaron los pies. 

“No había sentido los disparos, cuando caigo en la zanja veo como me quedaron los piesemotiv

“Fue horrible, con mi compañero no nos vamos a olvidar”, remarcó Yudati, mientras que Pengsawath, quien fue herido en el abdomen durante el ataque, agradeció la buena fortuna de ambos. “Tuvimos un Dios aparte los dos. Simplemente cumplimos con nuestro deber”, expresó el policía. Ambos efectivos se recuperan de sus lesiones en el Centro Médico Fitz Roy.