El futbolista Jonathan Fabbro llegó esta mañana a Tribunales luego de ser extraditado desde México para ser juzgado por un delito de abuso sexual y corrupción de menores. Será indagado por el juez Santiago Quian Zavalía, titular del Juzgado de Instrucción N°32.
El centrocampista llegó esposado y custodiado.
El deportista de 36 años, nacionalizado paraguayo, fue detenido el 20 de diciembre del año pasado en el estado de Puebla, tras una investigación que se realizó en Argentina respecto del probable abuso sexual de su ahijada de 11 años, cometido entre 2015 y 2017.
La denuncia la realizó la madre de la menor, quien relató a su familia los abusos a los que habría sido sometida luego de que un hermano, también menor de edad, leyó en su teléfono celular una comunicación a través a Whatsapp que habría mantenido la niña con Fabbro, quien además es su padrino.
En ese momento, el jugador fue separado del equipo Lobos en el torneo Apertura 2017 como consecuencia de la acusación y significó el fin de su carrera profesional.
De acuerdo con el comunicado difundido por la Procuraduría General de la República, el traslado del jugador se realizó el jueves en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, donde personal de Interpol México adscripto a la Agencia de Investigación Criminal custodió al deportista y lo entregó a agentes de Interpol Argentina.
LA TRAMA DETRÁS DE LA DENUNCIA
El 4 de abril de 2017, la madre de la menor llegó a la comisaría número 52 en Villa Lugano para denunciar un delito gravísimo. La calificación de su declaración fue "abuso sexual con acceso carnal". La mujer mostró las conversaciones que la niña mantuvo con Jonathan Fabbro, su padrino y dos semanas después se iniciaron los estudios psicológicos sobre la víctima.
Jonathan Fabbro, el jugador en la mira.
A la madre denunciante un oficial de servicio con rango de inspector oyó su relato. La mujer se había enterado unas horas antes de lo que venía a denunciar. Según dijo, su propia hija se lo había dicho en medio de una discusión por el uso excesivo del celular. Pero no era algo nuevo, ni tampoco era algo reciente. De acuerdo con su denuncia, habían transcurrido al menos dos años de ataques denigrantes.
"Me contó que la tocaba por todo el cuerpo, la besaba como si fueran novios y hace un año atrás la penetró", anotó el oficial en una planilla, según revelaron a BigBang fuentes cercanas. "Todo ocurría cuando estaban en casa de la abuela, o en la habitación de mi hija", siguió. "Además le pedía que se saque fotos en pollera y que se las enviara. No lo puedo creer. Siempre le tuve confianza por ser de la familia", declaró.
Algunos de los chats.
El jugador estaba lejos en ese momento. El ex enganche de River estaba en México, esperando que se cierre el contrato con Jaguares de Chiapas. La madre de la presunta víctima continuó investigando en las redes sociales de la menor y encontró más elementos que probarían su denuncia. A la causa se sumaron audios, fotos, conversaciones y mensajes de Facebook, Instagram y WhatsApp.
"La besaba como si fueran novios y hace un año atrás la penetró
La niña se sometió a una Cámara Gesell y comenzó un tratamiento de contención psicológica, al igual que el resto de la familia.
De comprobarse el abuso, la Justicia podrá solicitar que se realicen pericias en otros menores cercanos al jugador.
Según el entorno del jugador, está destrozado pero contenido por su familia y fuerte apoyo de su pareja, la modelo paraguaya Larissa Riquelme con quien tuvo un hijo.