El hombre que este martes le robó la pistola a un efectivo de la Policía de la Ciudad y generó un feroz tiroteo con más de 20 balazos en el que él, un ciclista y dos policías resultaron heridos, continua internado en estado reservado y los médicos evalúan amputarle una de sus piernas por la gravedad de sus heridas.
Según indicaron fuentes de la causa, tres fueron los disparos que recibió en una pierna, el abdomen y el tórax el imputado Jonathan Mosqueda, quien permanece internado en el Hospital Fernández del barrio porteño de Palermo.
"Fue sometido a una larga cirugía. Se encuentra en shock hemorrágico, en coma farmacológico, con ventilación mecánica y tiene su fémur izquierdo comprometido y desde ayer no tuvo mejoras. Los médicos analizan una posible amputación de la pierna", contó una de las fuentes de la causa.
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Por orden de la jueza a cargo de la investigación, Paula Petazzi, del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 11, Mosqueda está en el centro de salud en calidad de detenido y con custodia policial.
Según se pudo determinar, el agresor, oriundo del barrio Ejército de los Andes de la localidad bonaerense de Ciudadela, cuenta con antecedentes psiquiátricos y en 2016 el Juzgado de Familia 3 de San Martín ya había ordenado su internación, aunque ahora estaba en situación de calle.
El hecho ocurrió este martes a las 7.30 cuando, en el cruce de la calle 13 y la avenida Ramos Mejía, en inmediaciones del Barrio 31 y del ingreso a la estación del ex ferrocarril San Martín, un hombre sorprendió a un agente de la comisaría vecinal 1A de la Policía de la Ciudad, le quitó de su cartuchera su pistola reglamentaria, y huyó en dirección a la avenida Del Libertador.
El efectivo reportó el robo del arma y de inmediato llegaron al lugar en auxilio efectivos de la Dirección de Intervención Rápida (DIR) de la Policía de la Ciudad y agentes de la PFA pertenecientes a la División Ferrocarril San Martín, quienes dieron la voz de alto.
Como la situación fue registrada por varias cámaras de seguridad, se pudo observar que al no deponer su actitud, los policías le dispararon al agresor a las piernas, Mosqueda cayó herido y desde el piso logró montar y quitarle el seguro al arma y comenzó a disparar.
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En esas circunstancias, se produjo un intercambio de disparos y un agente de la DIR quien intentó quitarle el arma de una patada y al no lograrlo, se abalanzó sobre el agresor y logró reducirlo en una maniobra en la que ese policía terminó herido de un disparo en un tobillo.Tras el tiroteo, los dos efectivos que resultaron baleados -uno de la Policía de la Ciudad en un tobillo, y una agente de la Policía Federal (PFA) con un roce en una mano- también se encontraban en buen estado de salud en el Hospital Churruca de Parque Patricios, mientras que un ciclista de 24 años que pasaba por allí fue herido de un roce de bala, aunque también se encuentra bien.